El enemigo invisible que está afectando su respiración

📝HISTORIA EN BREVE

• Los ácaros del polvo son criaturas microscópicas similares a las arañas que viven en la ropa de cama y los muebles, se alimentan de células muertas de la piel y producen heces que causan reacciones alérgicas y asma
• El sistema inmunológico de las personas con alergias detecta de manera indebida las heces de los ácaros de polvo como peligrosas, lo que produce anticuerpos IgE que provocan los síntomas a través de los mastocitos que liberan histamina
• El asma hace que durante los ataques las vías respiratorias se inflamen y se estrechen, lo que complica el proceso de la respiración, y de acuerdo con los investigadores, los ácaros del polvo son un factor importante en todo el mundo
• Para controlar los ácaros del polvo es necesario lavar la ropa de cama con agua caliente de manera frecuente, utilizar fundas a prueba de alérgenos, evitar la humedad y limpiar con aspiradoras con filtro HEPA
• Los cambios en la alimentación ayudan a controlar el asma, incluyendo limitar el ácido linoleico, aumentar las grasas omega-3 y consumir alimentos ricos en quercetina como manzanas, cebollas y brócoli

🩺Por el Dr. Mercola

¿Alguna vez ha despertado con la nariz congestionada, picazón en los ojos y opresión en el pecho? Es probable que crea que se trata de una “alergia de la mañana”, pero los culpables se esconden en su propia casa y son los ácaros del polvo. Estas criaturas microscópicas, invisibles a simple vista, causan asma alérgica, una afección en la que las vías respiratorias se inflaman y se estrechan en respuesta a los alérgenos. Las partículas fecales que se encuentran en el interior del polvo son las que provocan asma alérgica.¹

Sabía que los ácaros viven en su hogar

Los ácaros del polvo son criaturas muy pequeñas de ocho patas, que son familiares de las arañas y las garrapatas. Viven en su casa, pero son tan pequeños que es imposible verlos sin un microscopio. Los ácaros son tan pequeños en relación con nosotros, que sería como encontrar una aguja en un pajar. Se encuentran en lugares donde se acumula el polvo, como la ropa de cama, alfombras, muebles tapizados e incluso las cortinas.

Estas criaturas microscópicas se alimentan de células muertas de piel de los humanos y las mascotas. Son como pequeños recicladores de nuestros hogares ya que descomponen la materia orgánica. Aunque esto pueda sonar un poco desagradable, es una parte esencial del ecosistema de un hogar. No muerden ni pican, y su presencia suele pasar desapercibida a menos que alguien desarrolle alergia a ellos.

Los ácaros del polvo pasan por varias fases de vida: huevo, larva, ninfa y adulto. Prefieren los ambientes cálidos y húmedos, por lo que proliferan en ropa de cama y colchones debido a que allí encuentran calor y humedad en nuestros cuerpos. Por esta razón es importante controlar la humedad en el hogar ya que así evita las poblaciones de ácaros del polvo.

De manera errónea se cree que los ácaros del polvo pican a los humanos. Pero eso es mentira. El problema no son los ácaros en sí, sino sus partículas fecales, que son las heces y partes del cuerpo en descomposición. Estas diminutas partículas se dispersan en el aire y se inhalan, lo que provoca alergias en personas con asma.

La defensa equivocada de cuando las alergias atacan

El sistema inmunológico de los humanos funciona como un ejército que protege un castillo, ya que se encuentra en constante defensa contra invasores dañinos como bacterias y virus. Cuando estos invasores entran al cuerpo, el sistema inmunológico los reconoce como amenazas y los ataca para eliminarlos. Este es un proceso normal y esencial para gozar de una salud óptima.

Sin embargo, el sistema inmunológico de las personas con alergias comete un error. Detecta sustancias inofensivas, como las heces de los ácaros del polvo, como invasores peligrosos. Esta reacción exagerada desarrolla los síntomas de la alergia. Si regresamos a la idea del castillo, imagine que el ejército confunde a un visitante amigable con un enemigo y lo ataca.

Un factor clave en las reacciones alérgicas es la IgE, que es un tipo de anticuerpo. Cuando alguien se expone por primera vez a un alérgeno, como las heces de los ácaros del polvo, su cuerpo produce anticuerpos IgE específicos para ese alérgeno.² Estos anticuerpos se adhieren a los mastocitos, que se encuentran en los tejidos de todo el cuerpo.

La próxima vez que la persona se expone al mismo alérgeno, éste se une a los anticuerpos IgE de los mastocitos. Esto hace que los mastocitos liberen histamina y otras sustancias químicas que causan los síntomas más comunes de la alergia, como estornudos, secreción nasal, picazón en los ojos y erupciones en la piel. Y, asma en algunas personas. Si no se trata de manera correcta, con el paso del tiempo su lista de alergias será mayor:³

“La mayoría de los pacientes que en un principio tienen un solo trastorno alérgico, como la dermatitis atópica, tarde o temprano desarrollan más, como la rinitis alérgica y el asma alérgico (esto se llama marcha alérgica o marcha atópica).

Este proceso podría complicarse por un círculo vicioso en el que la inflamación alérgica disminuye la función de la barrera epitelial. Esto aumenta la exposición del sistema inmunológico a los alérgenos originales y adicionales, y la IgE específica del alérgeno existente contribuye a la sensibilización a nuevos alérgenos”.

El asma vuelve más estrechas las vías respiratorias y causa problemas para respirar

El asma es una enfermedad respiratoria crónica que afecta las vías respiratorias, que son los conductos que ingresan y expulsan el aire de los pulmones. Cuando se desarrolla, estas vías respiratorias se inflaman y causan problemas para respirar. Tener un ataque de asma es similar a intentar respirar a través de un popote.

Cuando ocurre un ataque de asma, el revestimiento de las vías respiratorias se inflama. Los músculos que rodean las vías respiratorias también se tensan, lo que estrecha aún más el paso. Esto dificulta la entrada y salida de aire de los pulmones, lo que provoca varios síntomas desagradables.

Los síntomas más comunes de un ataque de asma incluyen sibilancia (un silbido al respirar), tos, opresión en el pecho y dificultad para respirar. La intensidad de estos síntomas varía de leve a grave, lo que afectará la calidad de vida de las personas. Una vez más, los ácaros del polvo son un alérgeno común en los ataques de asma, como se señala en un estudio publicado por el European Journal of Allergy and Clinical Immunology:⁴

“En la actualidad, se sabe que los ácaros del polvo doméstico (HDM, por sus siglas en inglés), como Dermatophagoides (D) pteronyssinus o D. farinae, son la fuente de los alérgenos de interiores más importantes que se relacionan con el asma en todo el mundo y contribuyen al desarrollo de IgE específica para el alérgeno de alto título.

Existe evidencia que relaciona las condiciones alérgicas como el asma, la rinitis alérgica (RA) y la dermatitis atópica (DA) con la exposición a los ácaros del polvo doméstico (HDM) u otros alérgenos de interiores”.

Además, es importante comprender la diferencia entre alergias y asma. Las alergias son las primeras respuestas inmunológicas a un detonante, como los ácaros del polvo. El asma es una enfermedad pulmonar crónica en la que las vías respiratorias son demasiado sensibles.

Los ácaros del polvo provocan reacciones alérgicas que después causan síntomas de asma en personas susceptibles. Entonces, aunque no todas las personas con alergia a los ácaros del polvo desarrollarán asma, la exposición a los ácaros del polvo es un detonante importante de ataques de asma en las personas susceptibles.

Qué medidas seguir para evitar el asma

Existen varias estrategias para reducir la exposición a los ácaros del polvo y ayudar a controlar los síntomas del asma. Uno de los pasos más importantes es crear un ambiente que disminuya la cantidad de los ácaros del polvo en su hogar. En primer lugar, lavar de manera regular su ropa de cama, incluyendo las sábanas, fundas de almohadas y mantas, con agua caliente para ayudar a matar los ácaros del polvo.⁵

Utilizar fundas de colchón y almohadas a prueba de alérgenos crea una barrera que evita que los ácaros del polvo infecten su ropa de cama. Aspirar de manera regular con una aspiradora con filtro HEPA ayuda a retener los ácaros del polvo junto con sus heces, lo que evita que se transmitan por el aire. Mantener niveles bajos de humedad (por debajo del 50 %) en su hogar también ayudará a reducir las poblaciones de ácaros del polvo, ya que prosperan en ambientes húmedos.⁶

Es esencial realizar limpieza de manera habitual, en especial en habitaciones y salas. Enfóquese en las áreas donde tiende a acumularse el polvo, como alfombras, tapetes, muebles tapizados y cortinas. Quitar el polvo de las superficies con un paño húmedo ayudará a atrapar el polvo en lugar de esparcirlo. Las pruebas de alergia ayudarán a identificar ciertos detonantes, como:⁷

• Mascotas: es muy probable que la exposición a la caspa, que son escamas de la piel de su mascota, así como al pelo, la orina o la saliva provoquen asma.
• Polen: sustancia en polvo que liberan los árboles, la hierba y las malas hierbas. El polen de los árboles y del pasto alcanzan sus niveles más altos durante la primavera, mientras que el polen de las malezas y la ambrosía tienen niveles altos durante el otoño.
• Moho: los hongos que se forman en moho liberan esporas que provocan asma cuando se inhalan.
• Cucarachas: la exposición a los excrementos, así como a partes del cuerpo de las cucarachas, provocará asma.
• Alimentos: es posible desarrollar alergia a cualquier alimento, pero las más comunes incluyen la soya, trigo, cacahuates, huevos, pescado y mariscos.⁸

Una alimentación adecuada ayuda a controlar la inflamación que se relaciona con el asma

Optimizar la función de las mitocondrias es una de las estrategias más importantes para controlar el asma, ya que es una enfermedad autoinmune. Una de las medidas más importantes es minimizar el consumo de ácido linoleico (AL), que se encuentra en los aceites vegetales que se utilizan para cocinar la mayoría de los alimentos ultraprocesados. Además, los aceites vegetales vienen en diferentes presentaciones, y es importante familiarizarse con ellos. Los que más se utilizan incluyen:

Se recomienda reducir su consumo de AL a 5 gramos al día. Aunque lo ideal sería reducirlo a menos de 2 gramos al día. Esta es la mejor decisión, ya que su cuerpo requiere una cantidad mínima de AL. Si desea conocer la cantidad de AL que consume, puede ingresar sus alimentos en Cronometer.com. El siguiente paso es cocinar su propia comida en casa con grasas saludables, como ghee, mantequilla de leche de vacas alimentadas con pastura y aceite de coco.

Eliminar los aceites vegetales y reemplazarlos con grasas saludables es solo el comienzo. Las estrategias alimenticias adicionales incluyen:

• Agregar un poco más de grasas omega-3:  un estudio analizó los resultados de 695 mujeres embarazadas después de consumir un suplemento de aceite de pescado o de aceite de oliva en el último trimestre de su embarazo. Los investigadores analizaron a sus bebés durante los primeros cinco años de vida.

Descubrieron que los niños cuyas madres consumieron el suplemento de aceite de pescado tuvieron un riesgo 30.7 % menor de padecer asma en comparación con los niños cuyas madres consumieron aceite de oliva.⁹ Dicho esto, asegúrese de reducir su consumo de AL antes de aumentar su consumo de omega-3, ya que es un ácido graso poliinsaturado (PUFA).

Si existe una cantidad elevada de PUFAs en su sistema, el omega-3 causará un daño metabólico similar al AL. Por lo tanto, si está embarazada, sería prudente minimizar el consumo de AL y aumentar un poco el consumo de omega-3 para lograr una proporción equilibrada de omega-6 y omega-3.

• Beber leche sin pasteurizar:  cada vez son más conocidos los beneficios de la leche sin pasteurizar, y hay investigaciones que respaldan estas afirmaciones. Los investigadores realizaron un estudio que siguió a 983 bebés de áreas rurales de toda Europa durante su primer año de vida, y demostraron que los niños que tomaron leche sin pasteurizar tuvieron un riesgo 30 % menor de desarrollar infecciones respiratorias y fiebre.¹⁰

• Aumentar sus niveles de vitamina D: las investigaciones han demostrado que un mayor consumo de alimentos ricos en vitamina D durante el embarazo ayuda a reducir el riesgo de desarrollar asma¹¹ y rinitis¹² en los niños. Sin embargo, la mejor fuente de vitamina D son los rayos del sol. Para obtener una guía detallada sobre la exposición segura a los rayos del sol, lea el artículo: “Más del 50% de los problemas de salud mental se deben a la falta de esta vitamina”.

Agregue quercetina a su alimentación

Después de minimizar el consumo de AL, considere agregar más quercetina a su alimentación. La quercetina es un pigmento vegetal que pertenece al grupo de los flavonoides, y las investigaciones demuestran que este compuesto bioactivo ayudará a controlar los síntomas del asma. En un estudio publicado en el Journal of Functional Foods, los investigadores observaron que la quercetina exhibe propiedades antiinflamatorias que apoyan las vías respiratorias:¹³

“La etiología fundamental del asma es una afección Th2 típica caracterizada por niveles elevados de IgE, y la inflamación eosinofílica de las vías respiratorias disminuye la generación de citocinas Th2, moco e infiltración de eosinófilos en el tejido pulmonar.

La quercetina puede regular el equilibrio Th1/Th2, inhibir la expresión de Act1, reducir la infiltración de eosinófilos y la respuesta de las vías respiratorias, disminuir la producción de citoquinas y de IgE, y mejorar los cambios histopatológicos crónicos. Además, se ha demostrado que los nanocristales de quercetina tienen un antiasmático en una dosis mucho menor que la quercetina a granel.

Además, la quercetina tiene efectos antiinflamatorios sobre los neutrófilos de las vías respiratorias y tiene la capacidad de bloquear los canales permeables al Ca2+, que impiden que los músculos lisos de las vías respiratorias se precontraigan. La quercetina también podría ayudar a tratar los síntomas del asma al mismo tiempo que disminuye la necesidad de agonistas de acción corta”.

Ya que sabe cómo la quercetina ayuda a controlar el asma ¿cuál es la mejor manera de obtenerla? La ventaja de la quercetina es que se encuentra en muchos alimentos enteros. Estos incluyen vegetales de hojas verdes, frutas cítricas, moras azules, arándanos rojos y té verde. Las manzanas, en especial en la cáscara, así como las cebollas y el brócoli son los que tienen los niveles más altos.¹⁴

La quercetina también está disponible en forma de suplemento. Para maximizar su efectividad, el Dr. Sin Jung, quiropráctico, recomienda tomar de 500 a 1000 miligramos de dos a cuatro veces al día¹⁵ para protegerse del asma ocasionado por alergia.¹⁶ Para mejorar los resultados recomiendo combinar quercetina con ortiga, vitamina C, vitamina D o jengibre.¹⁷