📝HISTORIA EN BREVE
- Casi la mitad de las personas que viven en los Estados Unidos tienen hipertensión. Un estudio demuestra que no tratar la hipertensión incrementa el riesgo de alzhéimer en un 42 %
- La hipertensión daña los capilares cerebrales, lo que provoca coágulos sanguíneos, fugas y restricción del flujo sanguíneo, lo que, a su vez, puede causar problemas cognitivos y derrames cerebrales
- La presión arterial normal es de 120/80 mm Hg. Para obtener lecturas precisas, mida su presión arterial mientras está acostado por la noche después de descansar durante 20 minutos
- La deficiencia de vitamina D afecta el sistema renina-angiotensina-aldosterona, lo que incrementa la presión arterial. Los estudios también demuestran que las personas tienen mayores niveles de presión arterial durante los meses de invierno
- Contrario a lo que recomienda la medicina convencional, reducir el consumo de sal solo produce un efecto temporal en la presión arterial y puede causar desequilibrios de minerales que alteran la relajación vascular y los niveles de estrés
🩺Por el Dr. Mercola
La hipertensión o presión arterial alta es uno de los problemas de salud más comunes hoy en día. Según la Asociación Americana del Corazón (AHA), casi la mitad de los adultos que viven en los Estados Unidos tienen hipertensión. Lo peor es que a esta enfermedad también se le conoce como "el asesino silencioso", ya que muchas personas ni siquiera saben que la tienen.
Las investigaciones1 demuestran que la hipertensión incrementa el riesgo de una serie problemas de salud, tales como enfermedad renal crónica, fibrilación auricular, insuficiencia cardíaca y síndromes aórticos. Ahora, un estudio acaba de demostrar que la hipertensión también incrementa el riesgo de demencia, sobre todo de alzhéimer.
La hipertensión incrementa el riesgo de alzhéimer
En un metaanálisis que se publicó en la revista Neurology,2 los investigadores descubrieron que la hipertensión incrementa el riesgo de demencia. Sin embargo, ¿qué tan alta es la probabilidad? Pues esa es la pregunta que se dispusieron a contestar. En concreto, investigaron cómo la hipertensión a la mediana edad influye en el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer y de otros tipos de demencia. También analizaron el efecto de las intervenciones antihipertensivas en el riesgo.
Para su análisis, los investigadores seleccionaron 14 estudios longitudinales de una base de datos que monitorea el cambio cognitivo y la demencia a lo largo del tiempo. Cada estudio provino de un país diferente, lo que ayudó a obtener un panorama global de este problema de salud.
Después de filtrar factores como tener un diagnóstico de demencia al inicio del estudio, se seleccionó un total de 31 250 participantes. La duración del seguimiento de todos los estudios fue de entre dos y 15 años. El análisis se realizó con ayuda de un software especial, y una vez que terminaron, se incluyeron factores como las lecturas de presión arterial y si los participantes tomaban medicamentos para la hipertensión o no.3
Después de recopilar todos los datos, los investigadores analizaron las diferencias en el riesgo de alzhéimer entre las personas con hipertensión tratada y sin tratar:4
"Descubrimos que las personas de 60 años en adelante con hipertensión sin tratar tenían un riesgo 42 % mayor de demencia por cualquier causa que las personas sin hipertensión, y un riesgo 26 % mayor que las personas con hipertensión tratada.
La enfermedad de Alzheimer tiene factores de riesgo familiares, genéticos y ambientales diferentes a los de otros tipos de demencia, así como tratamientos modificadores de la enfermedad y sintomáticos específicos. Por lo tanto, las estrategias para reducir los riesgos del alzhéimer podrían ser diferentes a las que se requieren para otros tipos de demencia, y es importante entender el impacto específico de la presión arterial y del uso de antihipertensivos en el riesgo del alzhéimer y la demencia por cualquier causa".
El mecanismo detrás de la demencia relacionada con la presión arterial
Según los resultados, es evidente que la presión arterial afecta la salud cognitiva. La pregunta es ¿cómo? La sangre fluye hacia el cerebro a través de una extensa red de capilares, que son los vasos sanguíneos más pequeños del cuerpo. Según la clínica Cleveland, forman la barrera hematoencefálica y ayudan a llevar nutrientes al cerebro, mientras impiden que entren toxinas. Su estructura anatómica es diminuta, con un diámetro de 8 a 10 micrómetros.5
Además, estos capilares son muy sensibles a los cambios de presión. De hecho, los capilares de muchas personas se rompen cuando tosen muy fuerte o vomitan. Por lo general, esto se manifiesta como puntos rojos y pequeños en la piel que se curan por sí solos.6 Sin embargo, cuando incrementa la presión en los capilares dentro del cerebro, esa ya es otra historia.
Según la clínica Mayo, la hipertensión incrementa el riesgo de que se formen coágulos sanguíneos en las arterias que llegan al cerebro, lo que puede causar un derrame cerebral. En otros casos, la hipertensión daña los vasos sanguíneos, lo que provoca fugas o contracciones y restringe el flujo sanguíneo al cerebro. A la larga, todos estos cambios causan problemas cognitivos.7
De hecho, un estudio que publicaron investigadores del Cedars-Sinai respalda esta hipótesis.8 Según sus hallazgos, la hipertensión incrementa el riesgo de alzhéimer y de otros tipos de demencia.
¿Cómo saber si tiene riesgo de hipertensión?
La única forma de saber con certeza si tiene hipertensión es midiendo sus niveles, lo ideal es que lo haga a intervalos regulares desde casa y en sus chequeos médicos. Aquí le diré cómo interpretar sus resultados.
Si no lo sabía, una lectura de presión arterial arroja dos números. El número superior es la presión arterial sistólica (PAS), mientras que el número inferior es la presión arterial diastólica (PAD). El valor de la PAS se refiere a la presión más alta en las arterias, que se produce cuando se contraen los ventrículos del corazón.
El valor de la PAD es la presión arterial más baja, que se produce durante la fase de reposo del ciclo cardíaco. Una vez que tenga sus lecturas, consulte la siguiente tabla para determinar el estado actual de su presión arterial:9
Categoría |
Presión
sistólica mmHg (número superior) |
y/o |
Diastólica
mm Hg (número inferior) |
Normal |
Menor a 120 |
y |
Menor a 80 |
Elevada |
120 a 129 |
y |
Menor a 80 |
Presión arterial alta - etapa 1 (Hipertensión) |
130 a 139 |
o |
80 a 89 |
Presión arterial alta - etapa 2 (Hipertensión) |
140 o más |
o |
90 o más |
Crisis hipertensiva |
Superior a 180 |
y |
Superior a 120 |
Según la AHA y el Colegio Americano de Cardiología, la presión arterial normal para adultos es de 120/80 mm Hg. No obstante, sus niveles de presión arterial varían a lo largo del día. El Dr. Stephen Juraschek, experto en investigación clínica, dijo que el "estándar de oro" para mediciones precisas es el monitoreo ambulatorio de la presión arterial, pero afirma que el problema con este enfoque es que debe utilizar un dispositivo durante 24 horas, incluso mientras se duerme.10
Para obtener una lectura precisa, lo mejor es que mida su presión arterial por la noche, mientras está acostado. Según la investigación del Dr. Stephen Juraschek, este enfoque es una de las mejores formas de predecir el riesgo de enfermedades cardiovasculares. La cuestión es que interrumpirá su sueño, y eso también afectará de forma negativa su salud. Para un enfoque más práctico, mida su presión arterial por las noches, después de descansar unos 20 minutos.
También es muy importante asegurarse de utilizar un brazalete con un tamaño adecuado. Si se mide la presión arterial mientras está sentado, asegúrese de que su brazo esté apoyado sobre un escritorio con el brazalete a la altura del corazón, ya que esto ayudará a obtener mediciones precisas. Tener el brazo en una posición incorrecta puede provocar que reciba un diagnóstico erróneo de hipertensión. 11
Es fundamental controlar la presión arterial. Por desgracia, una vez que las personas descubren que su presión arterial no está dentro del rango normal, casi siempre recurren a los medicamentos, pero este no es el camino más inteligente a seguir. Hacer cambios saludables en el estilo de vida será muy beneficioso para su presión arterial. En pocas palabras, no necesita tomar un medicamento que puede causar una serie de efectos secundarios.
Los peligros de vapear y fumar
Los riesgos de vapear son similares a los de fumar, por lo que está de más decir que la mayoría de las personas ya saben lo peligroso que es. De hecho, las investigaciones relacionan el vapeo con un incremento de la presión arterial y la rigidez arterial.12 Cuando tiene una mayor rigidez arterial, el corazón debe trabajar más duro para poder bombear sangre, ya que las arterias rígidas no se expanden con facilidad. A la larga, esto provocará que el músculo cardíaco se vuelva más grueso (hipertrofia) y, en última instancia, se producirá una insuficiencia cardíaca.
En otro estudio, los investigadores siguieron a 175 667 participantes con una edad promedio de 52 años durante 45 meses. Y observaron que las personas que utilizaron cigarrillos electrónicos en algún momento de su vida tuvieron un riesgo 19 % mayor de insuficiencia que los participantes que nunca vapearon.13
Si fuma o vapea y quiere dejar de hacerlo, existen diferentes formas de lograrlo. Primero, le recomiendo que haga más actividad física, como caminar, ya que eso le ayudará a distraerse del antojo y a reducir el estrés, que es un factor que hace que le den más ganas de fumar. Actividades de atención plena, como el yoga, la meditación y la técnica de libertad emocional (EFT), también le ayudarán a controlar el estrés y las ansias de fumar.
La deficiencia de vitamina D daña los vasos sanguíneos
La vitamina D es uno de los nutrientes más importantes para una salud óptima, por lo que no obtener la suficiente cantidad también afecta la presión arterial. Así lo confirmó un estudio que se publicó en el International Journal of Molecular Sciences.14 Además, los investigadores también descubrieron que los niveles de presión arterial son menores en verano que en invierno. ¿Por qué?
Los investigadores analizaron la relación entre la vitamina D y la hipertensión, y encontraron que tener una deficiencia de esta vitamina estimula la actividad del RAAS (sistema renina-angiotensina-aldosterona), que es el proceso que mantiene la presión arterial a largo plazo.
En pocas palabras, incrementar la concentración de renina plasmática incrementa el riesgo de hipertensión y reduce la tasa de filtración glomerular, lo que afecta el sistema cardiovascular. De manera curiosa, la deficiencia de vitamina D afecta la presión arterial a través de la glándula tiroides:15
"La vitamina D participa en la homeostasis del calcio, ya que estimula la producción de transportadores de calcio, lo que incrementa la reabsorción de calcio en el riñón e induce la liberación de calcio osteoclástico en los huesos.
Por lo tanto, tener deficiencia de vitamina D disminuye la concentración de Ca2+ en el plasma, lo que provoca que se segregue la hormona paratiroidea (PTH) de las células principales de la glándula paratiroidea para contrarrestarlo. Además, varios estudios epidemiológicos demuestran que los niveles elevados de PTH se relaciona con mayores niveles de PAS y PAD, así como con una mayor prevalencia de HT".
Recuerde que el lugar en el que vive influye mucho en sus niveles de vitamina D. En un estudio que se publicó en la revista Nutrients,16 los investigadores demostraron que las personas que viven en latitudes superiores a 40 grados se exponen lo suficiente a la luz solar durante ciertos meses para obtener la vitamina D que necesitan, a diferencia de las personas que viven en el ecuador.
Si vive en un lugar donde no hay suficiente sol durante meses, le recomiendo que tome un suplemento de vitamina D3 de alta calidad. Para maximizar su efectividad, también consuma más magnesio, calcio y vitamina K2.
Para todas las demás personas, la mejor manera de optimizar sus niveles de vitamina D es pasando más tiempo al aire libre, pero hay algunas cosas que debe considerar antes de hacerlo. Si lleva una dieta que contiene mucho ácido linoleico (AL), es importante que limite su consumo a menos de 5 gramos por día. Si puede consumir menos de 2 gramos, mucho mejor. Esto se debe a que en su piel quedan residuos de AL que se oxidan cuando se expone a la luz del sol y, cuando esto sucede, se produce inflamación y daño al ADN.
Eliminar el exceso de AL de su cuerpo puede tardar entre cuatro y seis meses, por lo tanto, le recomiendo que durante este periodo evite la luz del mediodía solar. Mientras tanto, puede exponer su piel durante las primeras horas de la mañana y las últimas de la tarde, cuando los rayos del sol no son tan fuertes. Aunque no es lo óptimo, es lo más seguro mientras elimina el AL de su cuerpo.
Tomar dosis bajas de aspirina, astaxantina e hidrógeno molecular, así como aplicarse crema de niacinamida, también le ayudará a proteger su piel del daño.
Para una salud óptima, sus niveles de vitamina D deben ser de entre 60 y 80 nanogramos por mililitro (ng/ml). Hágase un análisis de sangre para determinar su nivel actual, así como la cantidad de suplementos que podría necesitar.
La sal no es su enemigo
Aunque la medicina convencional recomienda a las personas con hipertensión que reduzcan su consumo de sal, la realidad es que esta recomendación no tiene fundamentos sólidos. Si bien los Institutos Nacionales de Salud (NIH) afirman que adoptar esta estrategia le ayudará a controlar su presión arterial,17 solo es una solución temporal.
La sal, que también se conoce como sodio, es un electrolito muy importante para el cuerpo. Tener un nivel estable de sal ayuda al cuerpo a mantener el volumen de sangre que se requiere para una circulación saludable. Cuando disminuye de forma repentina el consumo de sal, se reduce el volumen de sangre, lo que afecta la capacidad del cuerpo para eliminar desechos. Además, su cuerpo entra en un estado de defensa que impide que sus riñones eliminen el sodio restante.
Esta retención de sodio incrementa el volumen sanguíneo, el problema es que también incrementa la vasoconstricción y eso provoca que la presión arterial vuelva a subir. Además, el cuerpo comienza a eliminar potasio y magnesio, que son dos minerales importantes para la relajación vascular.
Una vez que bajan sus niveles de potasio y magnesio, su cuerpo incrementa la actividad del sistema nervioso simpático, el cual es responsable de la respuesta de lucha o huida, lo que causa estrés. Como se menciona en un estudio18 que se publicó en el Journal of Preventive Medicine & Public Health, el estrés (sobre todo el crónico) contribuye a la hipertensión.
El cuerpo necesita entre 1500 y 3500 mg de sodio al día, pero esta cantidad depende de su nivel de actividad física. Para estar seguro, le recomiendo que se saque un perfil químico en ayunas que le muestre sus niveles de sodio. El nivel ideal es de alrededor de 139 (el rango óptimo es de 136 a 142).
Recuerde que también debe consumir más potasio, ya que trabaja de forma sinérgica con el sodio, lo que crea una homeostasis crucial que se conoce como proporción de sodio-potasio. Las investigaciones demuestran que, sin importar el consumo de sodio, existe una relación entre un mayor consumo de potasio y menores niveles de presión arterial.19
Como regla general, debe consumir cinco veces más potasio que sodio. Algunos alimentos ricos en potasio incluyen las naranjas, el melón, las espinacas y el yogur de animales alimentados con pastura.20
🔍Fuentes y Referencias
- 1 Hypertension. 2019 Dec 23;75(2):285–292, Abstract
- 2 Neurology. 2024 Sep 10;103(5):e209715, Abstract
- 3 Neurology. 2024 Sep 10;103(5):e209715, Results
- 4 Neurology. 2024 Sep 10;103(5):e209715, Antihypertensives and AD Prevention
- 5, 6 Cleveland Clinic, “Capillaries”
- 7 Mayo Clinic, “High Blood Pressure Dangers: Hypertension’s Effects on Your Body”
- 8 Cedars-Sinai, April 5, 2023
- 9 AHA, “What Is High Blood Pressure?”
- 10 AHA, September 8, 2023
- 11 Johns Hopkins Press Release October 7, 2024
- 12 Medicines (Basel). 2022 Apr 5;9(4):28, Abstract
- 13 Forbes, April 2, 2024
- 14 Int J Mol Sci. 2023 Feb 28;24(5):4679, Introduction
- 15 Int J Mol Sci. 2023 Feb 28;24(5):4679, Vitamin D and Hypertension
- 16 Nutrients 2024, 16(10), 1489, Abstract
- 17 NIH, December 5, 2023
- 18 J Prev Med Public Health. 2022 Nov 30;55(6):499–505, Conclusion
- 19 Clin Hypertens 30, 2 (2024), Effect of potassium on sodium balance
- 20 Harvard T.H. Chan School of Public Health, Potassium