📝HISTORIA EN BREVE

  • El experimento de la periodista británica Decca Aitkenhead con 10 adolescentes que dejaron de usar sus teléfonos celulares durante un mes, dio como resultado un aumento de energía, concentración y madurez, lo que resalta los beneficios de la desintoxicación digital.
  • En un estudio sobre jóvenes de entre 18 y 30 años se descubrió que, limitar el uso de las redes sociales a 30 minutos al día conducía a una reducción de la adicción, una mejora del sueño, una disminución de los niveles de estrés y una mayor satisfacción con la vida.
  • Según el psicólogo social Jonathan Haidt el uso excesivo de teléfonos celulares entre niños y adolescentes perjudica el desarrollo de la función ejecutiva, las habilidades sociales y la creatividad, lo que produce efectos de por vida.
  • La desintoxicación digital ayuda a recuperar tiempo y atención, lo que permite realizar actividades y experiencias más significativas, a la vez, reduce la exposición a campos electromagnéticos (EMFs) que es posible que sean dañinos.
  • Los enfoques paulatinos para la desintoxicación digital, tales como: establecer límites de uso y crear zonas libres de teléfonos, junto con la participación en actividades alternativas, conducirán a una relación más saludable con la tecnología.

🩺Por el Dr. Mercola

En una era en la que los teléfonos celulares se han convertido en una extensión de nosotros, la periodista británica Decca Aitkenhead realizó un audaz experimento que podría hacerle repensar su relación con la tecnología. Inspirado por la investigación del psicólogo social Jonathan Haidt sobre la salud mental de los adolescentes, Aitkenhead desafió a 10 adolescentes (sus dos hijos y sus amigos) a renunciar a sus teléfonos celulares durante un mes.1

Los resultados publicados en la revista Sunday Times Magazine del Reino Unido, ofrecen una visión convincente de cómo la desintoxicación digital o abstenerse de usar dispositivos electrónicos, transforma las vidas de los jóvenes; además de hacer eco sobre otras investigaciones sobre el mismo tema.

La desintoxicación digital genera “resiliencia y alegría inesperadas”

Haidt un psicólogo social de la Universidad de Nueva York escribió: "The Anxious Generation", un libro que describe la crisis de salud mental que surgió junto con el uso de teléfonos celulares y redes sociales por parte de los niños. Haidt dice que, este cambio en el uso de la tecnología que ocurrió a principios de la década de 2010 condujo a una "gran reestructuración de la infancia", incluidas alteraciones en el autoconcepto y las habilidades sociales.2

Las infancias basadas en el juego han desaparecido en gran medida, como resultado de la “pérdida de confianza social entre los adultos” y de que los padres se han vuelto “más temerosos, sobreprotectores y menos dispuestos a dejar que sus hijos pasen tiempo con otros niños sin supervisión en el mundo real”. En cambio, las infancias basadas en el teléfono son ahora la norma, por eso es que aumentaron las tasas de depresión, ansiedad, autolesiones y suicidio entre los jóvenes.3

Haidt sostiene que el uso excesivo de teléfonos celulares entre niños y adolescentes perjudicaría el desarrollo de la función ejecutiva y las habilidades sociales, lo que lleva a fragmentar la atención, el retraso en la madurez y la disminución de la creatividad, que podría persistir durante toda la vida.4

Además de dejar de usar los teléfonos móviles durante un mes, los adolescentes participaron en un campamento de dos días sin supervisión. Aunque al inicio algunos opusieron resistencia, al final del experimento los adolescentes informaron tener más energía y concentración. Leyeron más y dijeron sentirse más tranquilos y más eficientes. The Defender informó:5

"El campamento sin supervisión resultó muy transformador. Aitkenhead dijo que, a pesar de que al inicio se tenían dudas sobre la competencia de los adolescentes, demostraron un crecimiento sobresaliente: "En menos de 36 horas sin supervisión, parece que crecieron unos dos años". Aunque varios niños dijeron más tarde que les resultó difícil no volver a caer en viejos patrones, al final del viaje todos dijeron que no extrañaron sus teléfonos celulares.

Beneficios de la desintoxicación de las redes sociales: mejor sueño y menos estrés

En un estudio publicado en Behavioral Sciences se exploraron los efectos de limitar las redes sociales a su uso entre personas de 18 a 30 años.6 Los resultados revelaron que, una “desintoxicación de las redes sociales” podría tener beneficios significativos en la salud y el bienestar.

Los investigadores reclutaron a 43 adultos jóvenes y rastrearon su uso de teléfonos celulares y redes sociales durante dos semanas para establecer una referencia. Luego, se les pidió a los participantes que limitaran el uso de las redes sociales a 30 minutos diarios durante dos semanas, seguidos de dos semanas de uso normal. A lo largo del estudio, los participantes completaron encuestas sobre adicción, salud física, salud mental y relaciones. Algunos también participaron en entrevistas sobre sus experiencias.

En promedio, los participantes redujeron su uso de redes sociales en un 77.7 % durante el período de desintoxicación. Esta dramática reducción dio lugar a algunos cambios intrigantes. Los niveles de adicción a los teléfonos celulares y a las redes sociales disminuyeron mucho durante la desintoxicación y se mantuvieron bajos incluso dos semanas después de volver al uso normal. Esto sugiere que, tomar un descanso de las redes sociales ayuda a restablecer la relación con sus dispositivos de manera duradera.

Uno de los beneficios reportados que más destacó fue una mejoría en el sueño. Los participantes experimentaron una mayor duración del sueño y una mejor calidad del mismo durante el período de desintoxicación. Muchos compartieron que se quedaron dormidos más temprano porque no estuvieron navegando hasta altas horas de la noche. Estas mejoras en el sueño se mantuvieron hasta cierto punto, incluso después de volver al uso normal de las redes sociales.7

La desintoxicación también redujo los niveles de estrés entre los participantes. Dijeron que sentían menos presión para revisar de manera repetida las notificaciones o mantener una presencia en línea. También varios notaron un aumento en la productividad y la confianza. Si bien los efectos fueron pequeños pero significativos a nivel estadístico y respaldados por las respuestas de las entrevistas de los participantes.8

También se mostraron mejoras en las medidas de satisfacción con la vida y el bienestar general. Dichas ganancias se mantuvieron o incluso aumentaron aún más durante el período de seguimiento de dos semanas. El estudio revela que, alejarse de las redes sociales, aunque sea por un tiempo, ayuda a ganar perspectiva y sentirse más satisfecho con la vida.

Un enfoque manejable para el bienestar digital

Si abandonar por completo las redes sociales parece demasiado extremo, este estudio sugiere que un enfoque más moderado sigue siendo beneficioso. La mayoría de los participantes consideraron que limitarse a 30 minutos por día era un desafío, pero era factible. Después de un período de ajuste inicial, muchos se sorprendieron de lo mucho que disfrutaron la desintoxicación.

Algunos participantes recomendaron personalizar los límites en función del uso actual o centrarse en restringir primero las aplicaciones más "destructivas". A otros les resultó útil desactivar las notificaciones o eliminar aplicaciones de redes sociales de sus teléfonos durante el período de desintoxicación. La clave es empezar por encontrar un enfoque que parezca sostenible para su estilo de vida.

Aunque al inicio algunos participantes experimentaron sentimientos de desconexión, al final muchos informaron que pasaban más tiempo de calidad con amigos y familiares en persona.9 La desintoxicación los animó a buscar otras formas de conexión y entretenimiento. Incluso después de volver al uso normal, muchos participantes dijeron que se volvieron más conscientes de sus hábitos en las redes sociales y tomaron medidas para regular mejor su uso en el futuro.

Cómo recuperar el tiempo y la atención: resultados de un estudio

En un análisis exhaustivo publicado en Cureus se analizaron 21 ensayos con 3625 participantes y esto arrojó luz sobre los beneficios adicionales de abstenerse de utilizar dispositivos electrónicos. 10 Uno de los beneficios más inmediatos de la desintoxicación digital, como se observa en múltiples estudios, es la recuperación de su tiempo y atención.

En un estudio se examinaron las consecuencias de un período de 14 días en el que los jóvenes limitaron el uso de las redes sociales a 30 minutos al día. Los participantes informaron tener más tiempo libre para actividades que en verdad enriquecen sus vidas, como leer, hacer ejercicio o pasar tiempo de calidad con sus seres queridos. 11

Muchos experimentaron una sensación de alivio y libertad ante las constantes exigencias de sus dispositivos. En el estudio también se encontraron mejoras en la calidad del sueño, la satisfacción general con la vida y los niveles de estrés. Al alejarse del mundo digital, se da la oportunidad de estar más presente en el mundo físico, lo que genera conexiones más profundas y experiencias más significativas.

La desintoxicación digital mejora la salud mental y el bienestar

El análisis exhaustivo y otros estudios también demostraron impactos significativos de la desintoxicación digital en la salud mental. El uso excesivo de teléfonos celulares y redes sociales se relacionó con sentimientos de ansiedad, depresión y baja autoestima.12 Al tomar un descanso de estas plataformas digitales, muchos experimentan una reducción en estas emociones negativas.

En un estudio también se informó sobre las mejoras en la percepción de la salud y los lazos de apoyo entre los participantes. Además, limitar su exposición a las redes sociales ayuda a aliviar los sentimientos de incompetencia o miedo de perderse algo (FOMO, por sus siglas en inglés).13 Un estudio cualitativo que incluyó entrevistas con siete personas que experimentaron desintoxicaciones digitales, reveló que los participantes adoptaron una nueva perspectiva sobre su relación con la tecnología después de la experiencia.14

Se volvieron más conscientes de sus patrones de consumo digital y estaban mejor preparados para establecer límites en torno al uso de los dispositivos. Esta nueva conciencia condujo a un uso más intencional y equilibrado de la tecnología a largo plazo.

Mientras tanto, la investigación se centra en la adicción al teléfono celular entre los adultos jóvenes en la India y se destaca la importancia de la desintoxicación digital para reducir el uso excesivo del teléfono celular y sus efectos adversos. 15 Es importante encontrar un equilibrio saludable que le permita disfrutar de los beneficios de la tecnología sin sacrificar su bienestar ni sus conexiones con el mundo real.

Usar menos el teléfono celular reduce la exposición a los EMFs

Otro beneficio clave de tomar un descanso del mundo digital es exponerse menos a los EMFs La exposición a los EMFs de radiofrecuencia de teléfonos celulares y otras fuentes representa un riesgo sustancial para la salud. Por ejemplo, en un estudio controlado se descubrió que la radiación de los teléfonos celulares causa muerte celular aguda y altera la división celular en las células de la mejilla, de hecho, se produjo un aumento del 57 % en los indicadores de muerte celular después de una exposición alta.16

También, una revisión sistemática y un metaanálisis reveló que, usar un teléfono celular durante más de 1000 horas acumuladas a lo largo de la vida o el equivalente a solo 17 minutos por día durante 10 años, aumenta en un sorprendente 60 % el riesgo de desarrollar tumores.17

También en varios estudios se descubrió que los EMFs tienen un efecto nocivo sobre los sistemas reproductivos tanto de hombres como de mujeres. En una investigación publicada en Fertility and Sterility se descubrió que los hombres que usaban sus teléfonos celulares más de 20 veces al día tenían conteos de espermatozoides mucho más bajos que aquellos que solo los usaban una vez a la semana o menos.18

El camino a seguir es emprender su propia desintoxicación digital

Haidt sugiere adoptar los siguientes consejos como "normas" para ayudar a acabar con la adicción a los teléfonos celulares en niños y adolescentes:19

  1. No permitir el uso de teléfonos celulares antes de la preparatoria o alrededor de los 14 años
  2. No permitir las cuentas en redes sociales hasta los 16 años
  3. No permitir el uso de teléfonos celulares en las jornadas escolares
  4. Dotar de mayor independencia, juego libre y responsabilidades verdaderas a los niños

Haidt mencionó: "Si hacemos esas cuatro cosas, solucionaremos este problema en uno o dos años. No vamos a quemar a la tecnología; no obstante, necesitamos retrasar su uso".20 Asimismo, es importante que incluso para los adultos se recomienda hacer la desintoxicación digital y usar los dispositivos con moderación con medidas establecidas para reducir la exposición a los EMFs.

Para los adolescentes que buscan embarcarse en una desintoxicación digital, es importante abordar el proceso de manera paulatina y establecer objetivos realistas, como implementar una reducción paso a paso del tiempo frente a la pantalla. Comience por identificar sus patrones de uso actuales y las aplicaciones o actividades específicas que consumen la mayor parte de su tiempo.

Luego, establezca límites claros sobre cuándo y durante cuánto tiempo utilizará sus dispositivos cada día. También sería recomendable crear "zonas sin teléfono" en su casa, como la mesa del comedor y el dormitorio, para cultivar espacios sin distracciones digitales. Para que su desintoxicación digital sea más efectiva y placentera, intente reemplazar el tiempo frente a la pantalla con otras alternativas. Aquí tiene algunas ideas para empezar:

Participar en actividades físicas: únase a un equipo deportivo, salga a andar en bicicleta o a caminar a diario, o intente hacer yoga.

Explorar pasatiempos creativos: aprenda a tocar un instrumento, pruebe pintar o empiece a escribir.

Pasar tiempo en la naturaleza: salga a caminar, haga un picnic en el parque o comience un huerto.

Conéctese con amigos en persona: organice noches de juegos, grupos de estudio o sólo pase el rato.

Aprenda una nueva habilidad: empiece a cocinar, a tomar fotografías o a estudiar un idioma extranjero.

Practique la atención plena: pruebe meditar o llevar un diario para reflexionar sobre sus experiencias.

Lea libros: visite la biblioteca local y descubra nuevos géneros o autores.

Sea voluntario en su comunidad: encuentre causas que le interesen y aporten a su tiempo.

Al reducir de manera paulatina el tiempo que pasa frente a la pantalla y llenar esas horas con actividades interesantes sin conectarse, desarrollara una relación más consciente con los dispositivos digitales y, al mismo tiempo, mejorara su bienestar físico y mental general.