📝HISTORIA EN BREVE

  • Además de los beneficios para la salud del corazón, la aspirina tiene otros beneficios, como prevenir el cáncer, mejorar los resultados del embarazo durante la infección por influenza y como antídoto para la enfermedad del hígado graso y la fibrosis pulmonar
  • El uso prolongado (más de 10 años) de aspirina en dosis bajas podría disminuir el riesgo de demencia, en particular en personas con enfermedad cardíaca coronaria preexistente
  • La aspirina podría mejorar la manera en que se utiliza la glucosa, reducir la liberación de ácidos grasos, disminuir los niveles de cortisol y aumentar la tasa metabólica, lo que podría ayudarle a perder peso y mantener un equilibrio hormonal
  • Los estudios sugieren que la aspirina podría mejorar las tasas de supervivencia en las unidades de cuidados intensivos, ralentizar la progresión de los aneurismas aórticos abdominales y disminuir el riesgo de diabetes tipo 2
  • La mejor opción es la aspirina sin recubrimiento y de liberación inmediata. La dosis recomendada es de una tableta de 82 mg a 325 mg al día con su comida más grande y dependiendo de sus circunstancias

🩺Por el Dr. Mercola

Durante mucho tiempo se ha dicho que tomar una dosis baja de aspirina todos los días podría ayudar a prevenir ataques cardíacos y derrames cerebrales. Sin embargo, de la noche a la mañana, las autoridades sanitarias han refutado esta recomendación.1

Pero ¿por qué el cambio repentino? Dicen que es por los riesgos de sangrado, pero, al parecer, esa no es toda la verdad. Qué casualidad que este cambio se produce justo cuando llegan anticoagulantes más nuevos y mucho más caros al mercado. Estos medicamentos pueden costar hasta $ 550 al mes,2 mientras que la aspirina cuesta sólo $ 1.50.3

Es el mismo patrón que vimos con otros medicamentos, como la ivermectina. Los medicamentos seguros, efectivos y económicos fueron reemplazados por alternativas mucho más costosas. La industria farmacéutica ha hecho esto desde la década de los 70, cuando se introdujeron los medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE).

Le dicen que evite la aspirina, pero ¿qué le están ocultando? Como siempre, le pido que cuestione las noticias para ver quién se beneficia con estos cambios. Su salud y economía pueden depender de ello.

Durante décadas, la aspirina ha ayudado a prevenir enfermedades cardiovasculares (ECV). Hace poco, una revisión de 13 ensayos reveló que tomar aspirina en dosis bajas podría tener relación con un índice menor de los principales eventos de ECV, como ataque cardíaco y derrame cerebral.4

El riesgo absoluto podría disminuir hasta un 2.5 %, lo que significa que por cada 1000 personas que toman aspirina, 25 personas menos podrían experimentar un evento cardiovascular importante. Pero la verdad es que, además de beneficiar la salud cardíaca, la aspirina tiene otros beneficios. Conocer estos beneficios podría ayudarle a tomar control de su salud.

Cómo la aspirina podría ayudar a prevenir el cáncer

Estudios recientes encontraron que la aspirina podría ayudar a prevenir el cáncer colorrectal (CCR) y otros tipos de cáncer. Se ha demostrado que tomar por lo menos 75 miligramos (mg) de aspirina al día, durante varios años, podría ayudar a disminuir la incidencia y muerte por CCR,5 y el mayor beneficio se observó en el cáncer de colon proximal, que son neoplasias malignas que se producen en las secciones inicial y media del colon, también conocido como el lado derecho del colon.

De hecho, el consumo de aspirina durante más de 20 años se relacionó con un descenso del 35 % en la incidencia de CCR en las mujeres.6 El efecto parece depender de la dosis, lo que significa que entre más tiempo la tome mayores serán los beneficios. La aspirina también podría mejorar las tasas de supervivencia después de un diagnóstico de CCR; los usuarios habituales muestran un descenso del 29 % en los índices de mortalidad por CCR y del 21 % en la mortalidad general.8

Por interesante que parezca, los beneficios de la aspirina en el CCR podrían extenderse a otros tipos de cáncer. Un análisis de ocho ensayos encontró que el riesgo de muerte por cáncer a 20 años disminuyó un 20 %, y las muertes por cáncer gastrointestinal un 35 %. Estos hallazgos sugieren que tomar aspirina en dosis bajas durante varios años podría ayudar a prevenir el cáncer.

Los estudios también encontraron que la aspirina podría ayudar a tratar ciertos tipos de carcinoma hepatocelular (CHC) o cáncer de hígado. Un estudio de caso reveló que la aspirina podría controlar de forma efectiva la progresión de la enfermedad en un paciente con CHC provocado por mutaciones de poliposis adenomatosa coli (APC, por sus siglas en inglés).8 Los investigadores encontraron que estas mutaciones, que activan la vía Wnt, fueron la causa principal del cáncer en el paciente.

Al administrar aspirina en dosis altas (300 mg al día), los médicos lograron controlar la enfermedad por casi cinco años. La efectividad de la aspirina en este caso de CHC está relacionada con su capacidad para suprimir la vía Wnt, la cual influye de forma significativa en el desarrollo del cáncer. En pacientes con mutaciones de APC, la vía Wnt se hiperactiva, lo que estimula el crecimiento del tumor.

La aspirina activa la glucógeno sintasa quinasa 3 beta (GSK3β) que, a su vez, aumenta la fosforilación y degradación de la β-catenina, que es una proteína esencial en la vía Wnt.

Este mecanismo contrarresta los efectos de la mutación APC. Además, debido a que funge como un inhibidor de la ciclooxigenasa 2 (COX2), la aspirina podría tener propiedades anticancerígenas. Este caso demuestra cómo un medicamento común y económico como la aspirina podría utilizarse para apoyar los tratamientos contra el cáncer según los perfiles genéticos específicos.

La aspirina mejora los resultados del embarazo durante una infección por influenza

La aspirina en dosis bajas también podría mejorar los resultados del embarazo durante la infección por influenza.9 Un estudio con un modelo de ratón encontró que el tratamiento con aspirina podría mejorar de forma significativa la función del sistema vascular en ratas preñadas y contagiadas con el virus de la influenza A.10 Los ratones infectados tuvieron una mala vasodilatación, pero el tratamiento con aspirina restauró la función del sistema vascular.

Esto es importante, ya que un sistema vascular en mal funcionamiento durante el embarazo podría provocar complicaciones como preeclampsia y crecimiento restringido del feto. El estudio también encontró que la aspirina podría disminuir la inflamación en los vasos sanguíneos y la propagación del virus desde los pulmones a otros tejidos. En particular, el tratamiento con aspirina mejoró los resultados para los recién nacidos, incluyendo mejores tasas de supervivencia y un mayor peso al nacer.

Estos hallazgos sugieren que los efectos protectores de la aspirina podrían favorecer un embarazo más saludable, incluso frente a una infección por influenza. La dosis que se utilizó en el estudio fue similar a las dosis bajas de aspirina que se les recetan a algunas mujeres con embarazo de alto riesgo para prevenir la preeclampsia. Esto sugiere que el tratamiento también podría utilizarse de forma clínica. Ahora bien, segun Georgi Dinkov:11

"La buena noticia es que estos hallazgos no solo aplican a la gripe o embarazo. El COVID-19, así como la mayoría de las infecciones virales, provocan un mismo estado inflamatorio sistémico, el cual afecta al sistema vascular. Como tal, el estudio sugiere que la aspirina podría ser una intervención profiláctica y un tratamiento factible para el resto de las enfermedades virales".

La aspirina podría ayudar a tratar la enfermedad del hígado graso

Tomar aspirina todos los días podría tener más beneficios de los que imagina. Un estudio que se presentó en la reunión de 2023 de la Asociación Americana para el Estudio de las Enfermedades Hepáticas,12 reveló que la aspirina en dosis bajas podría ser un tratamiento efectivo para la enfermedad hepática esteatósica asociada a la disfunción metabólica (MASLD, por sus siglas en inglés), que antes se llamaba enfermedad del hígado graso no alcohólico.

El cambio en la terminología pretende reflejar con mayor precisión la disfunción metabólica subyacente relacionada con la enfermedad, haciendo hincapié en los factores de riesgo metabólico y la fisiopatología. En un ensayo, los investigadores encontraron que tomar 81 mg de aspirina al día podría mejorar de forma significativa la salud del hígado de los pacientes con MASLD.13

Durante un período de seis meses, los participantes que tomaron aspirina experimentaron un descenso significativo en el contenido de grasa del hígado en comparación con los participantes del grupo de placebo. Este descenso estuvo acompañado de mejoras en otros marcadores de la salud del hígado, incluyendo la inflamación y fibrosis.

Los hallazgos del estudio son muy interesantes, ya que demuestran la capacidad de la aspirina para abordar diversos aspectos de la salud del hígado. La aspirina no sólo disminuyó la cantidad de grasa en el hígado, también mostró tener beneficios para tratar la inflamación y fibrosis, que son dos factores esenciales en la progresión de la enfermedad hepática.

Los participantes que tomaron aspirina experimentaron un descenso del 17.3 % en el contenido de lípidos intrahepáticos (que es la cantidad de grasa almacenada dentro de las células del hígado), mientras que los del grupo placebo experimentaron un aumento del 30.3 %. Esta diferencia sugiere que la aspirina podría detener o incluso revertir la acumulación de grasa en el hígado, que es una característica de la MASLD.

Además, el grupo que tomo aspirina presentó mejoras en los niveles de enzimas hepáticas y otros marcadores de la salud del hígado, lo que es una indicación de un mayor impacto en la función del hígado.

La aspirina mejora las tasas de mortalidad en la UCI

Aunque el estudio anterior se centró en los beneficios de la aspirina para la enfermedad del hígado graso, una nueva investigación sugiere que también podría influir en los resultados de los pacientes que se encuentran en las unidades de cuidados intensivos. Un estudio que incluyó a 146 191 pacientes de la unidad de cuidados intensivos (UCI), encontró que el uso de aspirina durante la estadía en la UCI pudo haber ayudado a disminuir la tasa de mortalidad a los 28 días.14

Este efecto fue más evidente en pacientes con síntomas del síndrome de respuesta inflamatoria sistémica (SIRS, por sus siglas en inglés) pero sin sepsis. Estos hallazgos ayudan a explicar los múltiples beneficios de la aspirina. No sólo podría ayudar a prevenir que el hígado se inflame y acumule grasa, sino que también podría mejorar sus posibilidades de supervivencia si se encuentra en la unidad de cuidados intensivos.

La aspirina también podría ayudar a prevenir la diabetes y los aneurismas aórticos abdominales

La aspirina también ayuda a proteger contra la diabetes tipo 2. Un análisis del ensayo ASPREE, en el que participaron 16 209 adultos de 65 años o más, reveló que aquellos que tomaron aspirina en dosis bajas (100 mg al día) tenían un riesgo 15 % menor de desarrollar diabetes, en comparación con los participantes que tomaron placebo.15 Este hallazgo sugiere que la terapia con aspirina podría aportar muchos más beneficios, en especial para adultos mayores.

El estudio también encontró que el uso de aspirina podría ralentizar los picos de glucosa en la sangre en ayunas, lo que sugiere que la aspirina podría ayudar a controlar el azúcar en la sangre, incluso en personas que no desarrollan diabetes.

Un estudio de cohorte que incluyó a 3435 pacientes también demostró que la aspirina podría ayudar a ralentizar la progresión de los aneurismas aórticos abdominales (AAA), en especial en hombres y personas que no fuman.16 Esto revela otros beneficios potenciales de la aspirina, los cuales van más allá de la salud cardíaca y la prevención de la diabetes.

Los AAA son una enfermedad vascular grave que podría provocar rupturas, las cuales podrían ser mortales si no se controlan. El estudio encontró que los pacientes que tomaban aspirina tenían una probabilidad 36 % menor de progresión del aneurisma. Aunque la aspirina no tuvo un impacto significativo en la mortalidad a largo plazo ni en los riesgos de hemorragia grave, su potencial para ralentizar el crecimiento de los AAA podría ser un factor fundamental en el manejo de esta afección.

Efectos antifibróticos de la aspirina

La aspirina también podría ayudar a tratar la fibrosis pulmonar,17 que es una enfermedad que ocurre cuando el tejido de los pulmones se daña y forma cicatrices. Cuando dicho tejido se endurece y se hace más grueso, la función de los pulmones disminuye.

La aspirina podría ayudar a tratar la fibrosis pulmonar. Un estudio encontró que la aspirina podría suprimir la diferenciación y migración de los fibroblastos pulmonares, que son impulsores de la fibrosis pulmonar (cicatrización).18 Cuando los investigadores trataron las células en la fibrosis pulmonar con aspirina, la expresión de proteínas relacionadas con la fibrosis, como el colágeno, la fibronectina y la actina alfa del músculo liso, disminuyó de forma considerable.

En un modelo de ratón con fibrosis pulmonar, el tratamiento con aspirina disminuyó los depósitos de colágeno y la fibrosis pulmonar. Estos hallazgos sugieren que la aspirina podría ayudar a prevenir la cicatrización excesiva y remodelación tisular que se observa en la fibrosis pulmonar. Dada su amplia disponibilidad, bajo costo y perfil de seguridad, la aspirina podría ser una gran opción en el tratamiento de la fibrosis pulmonar.

El estudio también ayuda a explicar cómo la aspirina podría combatir la fibrosis pulmonar al promover la autofagia. La autofagia es el proceso en el que las células reciclan los componentes dañados y mantienen la homeostasis. Por interesante que parezca, un estudio observó que los pacientes con fibrosis pulmonar idiopática tenían una autofagia deficiente en el tejido de los pulmones.

El estudio encontró que el tratamiento con aspirina podría aumentar los marcadores de autofagia en las células y tejidos de los pulmones con fibrosis. Con ayuda de la microscopía electrónica, los investigadores también observaron más autofagosomas (que son estructuras involucradas en la autofagia) en las muestras tratadas con aspirina. Cuando se bloqueó la autofagia con inhibidores, también se revirtieron los efectos antifibróticos de la aspirina. Esto sugiere que la aspirina podría activar la autofagia para eliminar las proteínas dañadas y prevenir la acumulación del tejido cicatricial.

Debido a que activa el proceso natural de limpieza de las células, la aspirina podría ralentizar o incluso revertir la progresión de la fibrosis pulmonar, lo que se suma a sus beneficios y nuevos usos terapéuticos.

El uso prolongado de aspirina podría favorecer la función cognitiva

A pesar de que los estudios sobre los beneficios de la aspirina para la función cognitiva han sido variados, la investigación que se publicó en la revista Alzheimer's Research & Therapy destaca la importancia de su uso a largo plazo.19 El análisis encontró que tomar aspirina en dosis bajas durante más de 10 años fue fundamental para detectar un efecto protector contra la demencia.

Esto sugiere que empezar a tomar aspirina en la mediana edad y continuar durante por lo menos una década, podría beneficiar la función cognitiva. Los efectos protectores de la aspirina contra la demencia se observaron en mayor medida en personas con enfermedad cardíaca coronaria (CHD, por sus siglas en inglés) preexistente.

Entre los pacientes con CHD, el uso de aspirina en dosis bajas se relacionó con un riesgo 31 % menor de Alzheimer, 69 % menor de demencia vascular y 54 % menor de demencia por todas las causas. Si tiene CHD, la aspirina en dosis bajas podría beneficiar su salud cardiovascular y cognitiva.

Efectos metabólicos de la aspirina: de la quema de grasas al equilibrio hormonal

La aspirina también podría optimizar el uso de la glucosa para obtener energía, al mismo tiempo que impide que los ácidos grasos se liberen de las células grasas, en particular el ácido linoleico (AL), que es una grasa omega-6 que podría favorecer las enfermedades crónicas.

Esto es muy importante, ya que la mayoría de las personas en los Estados Unidos tienen un exceso de AL en sus tejidos y podría requerir una alimentación baja en AL por más de siete años para disminuirlo a niveles saludables. Por lo tanto, lo último que necesita es aumentar la liberación de AL en su cuerpo desde las reservas de grasa. Lo más recomendable es liberar el AL poco a poco y permitir que su hígado lo procese. Al ser soluble en agua, puede desecharlo a través de la orina sin que se convierta en prostaglandinas inflamatorias.

La aspirina también ayuda a reducir los niveles de cortisol basal, ya que disminuye la inflamación e inhibe una enzima que convierte la cortisona inactiva en cortisol activo. La aspirina disminuye la producción de aldosterona inducida por el estrés, lo que podría ayudar a reducir la presión arterial.

La aspirina también aumenta los niveles de dióxido de carbono y progesterona, al mismo tiempo que inhibe la principal vía inflamatoria: NF kappa-B, lo que podría ayudar a su cuerpo a aumentar de forma natural la producción de dos hormonas muy importantes, la testosterona y progesterona.

La aspirina también podría ayudar al desacoplamiento de las mitocondrias. El desacoplamiento del metabolismo oxidativo mitocondrial de la producción de ATP podría ayudarle a aumentar su tasa metabólica y perder peso. El dinitrofenol (DNP), al igual que la aspirina, desacopla el metabolismo mitocondrial y ayuda a perder peso. Por desgracia, se considera demasiado peligroso para uso clínico, debido a que su dosis efectiva está cerca de su dosis tóxica; por esta razón, ya no está disponible en los Estados Unidos.

Recomendaciones para comprar aspirina

Si decide tomar aspirina, evite las variedades de liberación prolongada, ya que contienen aditivos. La mejor opción es la aspirina de liberación inmediata, la cual se puede encontrar en Amazon. Ponga atención a la lista de ingredientes inactivos, el almidón de maíz debe ser el único en la lista. Después de una búsqueda exhaustiva, encontré un producto que cumple con estas características. La dosis recomendada, la cual depende de sus circunstancias, es de una tableta de 82 mg a 325 mg al día con su comida más grande.

Estoy convencido del potencial de la aspirina para prevenir enfermedades, y ahora tomo 111 mg al día de Aspirin Powder USP 60g de Health Natura, la cual cuesta menos de 20 dólares. Sin embargo, utilizo una versión de aspirina USP con 99 % de pureza que no viene en forma de tabletas. En mi opinión, sus efectos prometabólicos, antilipolíticos, antiinflamatorios, anticortisol y antiestrógenos son muy convincentes, además de que ha demostrado ser un producto seguro.

Si tiene sensibilidad a la aspirina, la mejor opción es un suplemento de ácido salicílico o corteza de sauce. Cuando toma aspirina, su cuerpo metaboliza el ácido acetilsalicílico en ácido salicílico, que es el compuesto responsable de los efectos antiinflamatorios, analgésicos y antitrombóticos de la aspirina. Este compuesto se encuentra en la corteza de sauce.

La corteza de sauce destaca como una alternativa natural convincente a la aspirina, encarnando la sabiduría ancestral de la medicina tradicional. A diferencia de los fármacos sintéticos, los compuestos activos de la corteza de sauce han coexistido con la bioquímica humana durante milenios, lo que resulta en una afinidad natural que los medicamentos modernos luchan por replicar.

Esta armonía proviene del consumo prolongado de pequeñas cantidades de estos compuestos por parte de nuestros antepasados, lo que permitió que nuestros cuerpos se adaptaran y los utilizaran de manera eficiente. El desarrollo de la aspirina como un medicamento patentado, en reemplazo de la corteza de sauce en el siglo XIX, marcó un cambio de la naturaleza al laboratorio, pero no necesariamente mejoró el remedio original.20

Mientras que la industria farmacéutica pasó décadas manipulando los compuestos de la corteza de sauce para crear un producto patentable, el remedio natural original sigue siendo un testimonio del poder de la medicina basada en plantas. Esta historia no solo resalta la efectividad de la corteza de sauce, sino que también sirve como un recordatorio del potencial a menudo pasado por alto de los remedios naturales y de la compleja relación entre el gobierno, la industria farmacéutica y la salud pública.

Aunque se estima que entre 240 mg y 600 mg de extracto de corteza de sauce (estandarizado al 15% de salicina) proporciona una dosis de salicina que equivale aproximadamente a 325 mg de aspirina, debido a las diferencias en el metabolismo y la biodisponibilidad entre la salicina y la aspirina, la cantidad total de extracto de corteza de sauce requerida es típicamente mayor.

En cuanto a la dosificación, para aproximar los efectos de 81 mg de aspirina, se necesitarían entre 400 mg y 800 mg de extracto de corteza de sauce estandarizado al 15% de salicina. Para igualar los efectos de 111 mg de aspirina, se necesitarían entre 500 mg y 1 gramo de extracto de corteza de sauce estandarizado al 15% de salicina.

En general, la aspirina es un medicamento versátil y poco apreciado con numerosos beneficios, que van más allá de apoyar la salud cardiovascular. Desde prevenir el cáncer y mejorar los resultados del embarazo, hasta los posibles tratamientos para las enfermedades del hígado y del deterioro cognitivo, los múltiples efectos de la aspirina justifican una mayor investigación y consideración.

Su efecto en el metabolismo y equilibrio hormonal sugieren otros usos terapéuticos. La gran variedad de beneficios de la aspirina sugiere que este medicamento común y económico podría ser mucho más efectivo de lo que las autoridades sanitarias reconocen en términos de apoyar la salud general y prevenir diversas enfermedades crónicas.