📝HISTORIA EN BREVE

• Al igual que las plantas, los seres humanos necesitamos luz solar para prosperar, ya que existe un mecanismo biológico en el cuerpo que transforma la luz solar en energía celular
• Cuando los rayos del sol tocan la piel, su cuerpo captura la luz roja y la del infrarrojo cercano para convertirlas en electrones. Luego, su cuerpo utiliza estos electrones para alimentar la cadena de transporte de electrones y crear ATP en las mitocondrias
• El estrés reductivo es un mecanismo biológico que podría afectar su capacidad para crear la cantidad suficiente de energía celular. Si salir al sol lo hace sentir peor, es posible que deba abordar primero el estrés reductivo
• Conectarse con la tierra y usar azul de metileno podría ayudar a eliminar el exceso de electrones que se acumulan en las mitocondrias. Sin embargo, es fundamental abordar las verdaderas causas del estrés reductivo

🩺Por el Dr. Mercola

Los efectos de exponerse al sol para su bienestar es un tema muy significativo para mí, y desde hace más de dos décadas es una de las cosas que recomiendo hacer. Uno de los beneficios más conocidos es que le permite optimizar sus niveles de vitamina D; sin embargo, sus beneficios van mucho más allá, ya que en realidad despierta la esencia de su biología.

En este artículo, explico por qué exponerse de manera adecuada al sol es una de las bases de la salud, en especial la manera en la que ayuda a mejorar la energía celular. Le recomiendo mucho que lo lea, ya que le ayudará a entender esta información innovadora que le permitirá a alcanzar una salud óptima.

Al igual que las plantas, los seres humanos necesitamos la luz del sol para prosperar

No existe ninguna duda de que el sol promueve todas las formas de vida del planeta. Por ejemplo, las plantas no pueden sobrevivir sin luz solar, ya que es necesaria para la fotosíntesis. Cuando los rayos del sol tocan una planta, los electrones de los cloroplastos, que son orgánulos en forma de saco que contienen moléculas de clorofila, convierten la energía solar en energía estructural en forma de glucosa. Esto alimenta los procesos biológicos en la planta.

Por otro lado, los seres humanos dependemos en mayor medida de los alimentos que consumimos como fuente de energía. Tome en cuenta que dije: “en mayor medida”, ya que también tiene la capacidad de utilizar la luz solar para producir energía celular.

En un entorno con poca luz, una planta puede sobrevivir durante un tiempo. Sin embargo, no prosperará, sus hojas no se pondrán verdes ni frondosas, no producirá flores hermosas y su crecimiento no será el adecuado. Lo mismo le podría pasar a los seres humanos. Si no se expone de forma regular al sol, no podrá alcanzar su máximo potencial de salud.

La luz del sol es el nutriente indispensable para vivir

Al igual que las plantas, los seres humanos necesitamos luz solar para prosperar, ya que existe un mecanismo biológico en el cuerpo que transforma la luz solar en energía celular. De hecho, estoy en el proceso de realizar algunos experimentos y acabo de crear un laboratorio de investigación mitocondrial para estudiar esta teoría.

En esencia, así es como funciona: cuando su cuerpo se expone al sol, recolecta electrones de la energía solar que se utilizan para producir energía en las mitocondrias. Es por eso que, si no se expone lo suficiente al sol, podría tener graves consecuencias en su salud.

Su cuerpo obtiene la mayor parte de energía de los alimentos que consume. Cuando los alimentos se digieren en el intestino, se metabolizan en pequeñas moléculas llamadas acetil-coenzima A.

A medida que la acetil-coenzima A entra a las mitocondrias y pasa por el ciclo de Krebs, se convierte en electrones, los cuales se transportan gracias a la NADH y FADH2 a la cadena de transporte de electrones (ETC). Esta última etapa de la respiración celular es donde el cuerpo transforma los electrones en trifosfato de adenosina (ATP), que es el combustible con el que funciona el cuerpo.

La salud celular también depende de la exposición al sol

Cuando los rayos del sol tocan la piel, su cuerpo captura la luz roja y la del infrarrojo cercano para convertirlas en electrones. Luego, su cuerpo utiliza estos electrones para alimentar la ETC y crear ATP en las mitocondrias.

Una sola cadena de transporte de electrones puede producir hasta 100 ATP por segundo. Si tomamos en cuenta que cada mitocondria contiene 100 000 cadenas de electrones, eso significa que produce 10 millones de moléculas de ATP por segundo.

Cuando multiplica eso por 40 cuatrillones (esa es la cantidad de mitocondrias que tiene en el cuerpo) significa que produce 400 millones de cuatrillones de ATP por segundo.

Si tiene una salud óptima, producirá suficiente ATP al día para alimentar todas las funciones de las células del cuerpo. No obstante, si no produce suficiente ATP, entonces no tendrá la suficiente energía celular para todos los procesos. ¿Cuáles son las consecuencias? Algunos procesos "no esenciales" se regularán de manera descendente para conservar energía. El combustible disponible se destinará a los procesos esenciales para sobrevivir.

No sólo se sentirá terrible y experimentará fatiga, sino que también aumentará su riesgo de sufrir casi todas las enfermedades crónicas degenerativas conocidas, incluyendo cáncer, diabetes y enfermedades del corazón. A esto le llamo mi teoría unificada de la salud celular.

Esta es la razón por la que necesita luz solar. Aunque requiere una serie de pasos diferentes, pero igual de complejos que cuando se utiliza la energía de los alimentos, en última instancia tiene el mismo resultado, es decir, transfiere los electrones a la ETC de las mitocondrias, lo que mejora la salud celular.

La siguiente imagen en 2-D le ayudará a entender mejor la diferencia entre cómo su cuerpo crea la energía celular a partir de los alimentos y del sol, así como los pasos involucrados.

La mayoría de las personas se esconde del sol

Exponerse de forma regular al sol es una de las estrategias más beneficiosas para ayudarle a alcanzar una salud óptima. Además de exponerlo a la luz roja e infrarroja cercana, las cuales contribuyen a la producción de energía celular y que tienen otros beneficios para la salud, también ayuda a mejorar sus niveles de vitamina D y a producir melatonina, lo que ayuda a fijar su ritmo circadiano para que pueda dormir mejor por la noche.

Por desgracia, la mayoría de las personas no se expone lo suficiente al sol. De acuerdo con una encuesta que se publicó en el portal Medium,¹ en Estados Unidos el 58.8 % de las personas mencionan que pasan una hora o menos al aire al libre, mientras que una tercera parte solo disfruta de 30 minutos o menos al aire libre. Las mujeres y los adultos jóvenes pasan más tiempo en casa que al aire libre.

No hay duda de que pasar tiempo al aire libre bajo la luz del sol es una de las mejores estrategias para recuperar y mantener la salud, así que siempre que tenga la oportunidad, salga al aire libre. Es muy importante exponerse todos los días a los rayos del sol, alrededor de una hora bajo el mediodía solar (las 12 del mediodía o la 1 p. m. durante el horario de verano) para obtener todos los beneficios.

Al hacerlo, utilice poca ropa con el fin de exponer al sol la mayor cantidad de piel posible. También puede realizar actividades al aire libre, como caminar o realizar una rutina de ejercicio.

Por qué es importante abordar el estrés reductivo

Llevo más de 40 años ejerciendo la medicina, y cuando todavía atendía pacientes, algunos mencionaban que cuando salían al sol se sentían peor, como si su cuerpo les pidiera que dejaran de hacerlo.

La realidad es que el cuerpo nunca miente. Si le dice que se proteja del sol, tal vez hay algo más a lo que deba prestar atención. Entonces, si este es su caso, la razón podría ser el estrés reductivo, el cual es un mecanismo biológico que podría afectar su capacidad para crear la cantidad suficiente de energía celular.

En pocas palabras, el estrés reductivo significa que tiene demasiados electrones en la cadena de transporte de electrones en las mitocondrias. Brad Marshall, biólogo molecular, explicó lo siguiente en una entrevista:

“Las calorías de los alimentos solo son electrones entre los enlaces de carbono e hidrocarburo, y en esos electrones entre el carbono y el hidrógeno es donde está la energía. Entonces, tenemos estos sistemas donde los electrones fluyen a través de la célula, y utilizamos ese flujo de electrones para producir ATP, que es el combustible con el que funciona nuestro cuerpo.

Los electrones se mueven sobre transportadores de electrones, que son similares al NAD. Cuando el NAD tiene electrones, se conoce como NADH, y cuando los pierde, es NAD+. Lo ideal es tener un equilibrio entre el NAD+ y el NADH. Y así, el flujo de electrones funcionará.

El problema es que tenemos demasiados electrones en el sistema. Obtenemos demasiados NADH y muy pocos NAD+. Esto sucede porque permitimos que ingrese demasiado combustible al sistema. Esa suele ser la causa. Utilizaré una analogía, en el pasado, los automóviles tenían carburadores. El carburador toma el combustible y el aire para mezclarlos”.

Cuando hay un exceso de electrones en el cuerpo, podría obstruir la serie de procesos que ocurren en su cadena de transporte de electrones. Imagine que vierte agua de una botella grande en un embudo pequeño, si es demasiada agua y la vierte muy rápido, se desbordará y se derramará.

El estrés reductivo podría provocar diversos daños, ya que el excedente de electrones impide que el ETC se transfiera al Complejo IV, y se combinan con el oxígeno para crear especies reactivas de oxígeno.

El estrés reductivo también ralentiza el metabolismo y la producción de energía. Cuando eso sucede, los sistemas de su cuerpo comienzan a recibir más energía de la que pueden manejar, lo que puede causar un caos que a larga podría provocar daños importantes.

Caminar descalzo sobre la tierra (“grounding”) podría ayudar a abordar el estrés reductivo

Abordar el estrés reductivo significa eliminar el exceso de electrones que se acumulan en las mitocondrias, lo cual es provocado por su incapacidad para crear suficiente energía celular. Por fortuna, existen dos métodos que puede utilizar y que recomiendo mucho. Uno es conectarse a la tierra o también conocido como el “grounding”.

¿Alguna vez ha caminado sobre una alfombra en un ambiente con poca humedad y luego toca la perilla de metal de la puerta? Recibirá una descarga eléctrica. Sin embargo, a diferencia de la creencia popular, no son los electrones que pasan de la perilla de la puerta a su mano, es al revés.

El estrés reductivo que se generó está conectado a la perilla de la puerta porque la humedad es baja y no actúa como aislante. Entonces, cuando su dedo se conecta al metal, descarga los electrones en forma de chispas. Por interesante que parezca, esto es algo bueno, ya que libera el exceso de electrones y no ralentiza su producción de energía en las mitocondrias.

Otra manera de liberar el exceso de electrones es a través del “grounding” (conectarse a la tierra). Esto consiste en volver a conectarse eléctricamente a la superficie de la tierra. Esto lo puede hacer al caminar descalzo, acostarse en el suelo o sumergirse en el agua.

Sin embargo, si vive en Estados Unidos, el grounding no le servirá mucho, ya que está expuesto a la "electricidad sucia" provocada por las distorsiones de alto voltaje en la electricidad que se suministra a las casas y edificios. Los dispositivos electrónicos modernos son la razón principal por la que se producen dichas distorsiones. Por consiguiente, si hace “grounding”, podría descargar su exceso de electrones, pero también obtendría frecuencias nocivas de la tierra.

Sin embargo, hay dos excepciones: si vive en un área muy remota y si está cerca del océano. En las zonas montañosas donde no hay electricidad y donde la subestación más cercana está a kilómetros de distancia, es muy probable es que el suelo esté sano y pueda conectarse a la tierra de forma segura.

En cuanto al océano, es un estanque tan grande que aceptará esos electrones. Además de tener sal, que es un buen conductor, le brinda una conexión continua y estable con el estado eléctrico natural de la Tierra, lo que permite que el exceso de electrones de su ETC se transfiera de forma efectiva a la Tierra.

Use azul de metileno

En lo personal, no recomiendo recurrir a medicamentos, pero creo que el azul de metileno, que se dice que es el medicamento más antiguo que existe en la actualidad, podría ser una excelente alternativa al “grounding”, ya que podría ayudarlo a crear la suficiente energía celular. El azul de metileno fue desarrollado en 1876 por Heinreich Caro² y fue el primer medicamento sintético, aunque también se utiliza como tinte textil para pantalones de mezclilla.

Cuando los científicos descubrieron sus propiedades médicas, se convirtió en el primer medicamento sintético, y se utilizó para tratar la malaria, la metahemoglobinemia (un trastorno en el que la hemoglobina no puede liberar oxígeno de manera efectiva a los tejidos del cuerpo) y como antídoto contra el envenenamiento por cianuro.

Este medicamento tiene efectos metabólicos muy potentes y, en cuanto al estrés reductivo, podría brindar beneficios al actuar como un aceptor de electrones muy poderoso, el cual elimina de forma temporal el estancamiento debido a un mal metabolismo, para que pueda volver a funcionar de manera correcta y producir energía celular. Si existe un bloqueo en la cadena de transporte de electrones, el azul de metileno transfiere los electrones al oxígeno, lo que evita la obstrucción.

Cabe recalcar que necesita una receta médica para poder comprar azul de metileno. Para uso humano, la opción más segura es el azul de metileno de grado farmacéutico, para el que se necesita una receta médica.

Nunca use azul de metileno de grado industrial (que se usa para limpiar peceras), ya que podría estar contaminado con metales pesados. Lo mejor es pedirle a su médico que le dé una receta para una farmacia. En mi opinión, la mejor opción son las capsulas de azul de metileno.

Estas pastillas compuestas se pueden convertir en cápsulas de 50 miligramos, pero como solo necesita 5 mg una vez al día, una píldora de 50 mg es suficiente para 10 dosis. Tome una pastilla de 50 miligramos (tenga cuidado al abrirla, ya que el tinte podría mancharle las manos y la encimera) y póngala en 50 centímetros cúbicos (cc) de agua, que es poco menos de 2 onzas.

Mida 5 cc, que sería el equivalente a una cucharada, y luego guarde el resto. Si lo que desea es optimizar los beneficios de exponerse a los rayos del sol, lo mejor es tomarlo 30 minutos antes de salir al sol.

Aborde la verdadera causa del estrés reductivo

Dicho lo anterior, cuando se trata de optimizar su salud celular, le recomiendo abortar la causa real en lugar de depender del azul de metileno y del “grounding”. Aunque es muy útil, su cuerpo no podrá alcanzar todo su potencial si no aborda su consumo excesivo de AL, mejora su microbioma intestinal, disminuye su carga de estrógeno y elimina los campos electromagnéticos.

Estos cuatro factores esenciales afectan la función de las mitocondrias, por lo que abordarlos es un paso fundamental para recuperar la salud celular. Una vez que haya abordado estos cuatro factores, su cuerpo comenzará a recuperarse, repararse y regenerarse, y recuperará su capacidad para aumentar la función de las mitocondrias y la energía celular.