📝HISTORIA EN BREVE
- El documental titulado "Beyond Impossible — The Truth Behind the Fake Meat Industry", afirma que la carne de laboratorio, o carne sintética, podría representar una amenaza grave para la salud, lo que contradice todo lo que se dice sobre estas alternativas a la carne
- Las carnes de laboratorio y sintéticas no contienen los nutrientes esenciales que se encuentran en las carnes naturales, incluyendo los aminoácidos específicos que son fundamentales para tener músculos fuertes y una buena salud en general
- A pesar de que se promociona como una alternativa sostenible, los estudios demuestran que fabricar este tipo de carnes produce emisiones de gases de efecto invernadero mucho mayores que las prácticas ganaderas convencionales
- La evidencia demuestra que los métodos de cultivo regenerativos son mucho más beneficiosos para el medio ambiente que los métodos de cultivo industrial que utilizan para crear la carne ultraprocesada
- El documental critica las políticas globales actuales que impulsan estas alternativas a la carne, al sugerir que forma parte de una agenda con objetivos ocultos, una que amenaza la seguridad de nuestro suministro de alimentos y la salud pública
🩺Por el Dr. Mercola
En el año 2024, se realizó una revisión sistemática1 de la literatura que confirma lo que han demostrado múltiples estudios: mientras más alimentos ultraprocesados consuma, mayor será su riesgo de desarrollar problemas de salud.
La revisión, que incluyó 45 análisis de agrupación y que involucró a 9 888 373 participantes, encontró una relación directa entre 32 parámetros de salud y la exposición a alimentos ultraprocesados, incluyendo la disfunción metabólica, el cáncer, los problemas mentales, respiratorios, cardiovasculares y gastrointestinales, así como mortalidad por cualquier causa.
Los trastornos de depresión y ansiedad también se correlacionaron con el consumo de alimentos ultraprocesados. Otros estudios también relacionan los alimentos ultraprocesados con el deterioro cognitivo2 y la obesidad.3
Si consideramos los efectos bien establecidos de los alimentos ultraprocesados, solo es cuestión de tiempo para que salga a la luz toda la verdad sobre los efectos dañinos de las carnes de laboratorio y sintéticas, las cuales no son más que otro alimento ultraprocesado.
La corrupción y las mentiras detrás de la industria de la carne de laboratorio
El documental titulado “Beyond Impossible — The Truth Behind the Fake Meat Industry” de Gravitas Documentaries, expone la corrupción y las mentiras de la industria de la carne de laboratorio. Como se menciona en el documental, esta industria es una consecuencia de la creciente popularidad del estilo de vida vegano, en el que evitan cualquier producto de origen animal. Sin embargo, podrían existir muchos otros factores ocultos. Según Gravitas:4
“¿Qué tienen en común la Universidad de Harvard, los veganos del internet y el Foro Económico Mundial? La misión de tratar de hacer que todo el mundo se vuelva vegano. Pero ¿por qué? ¿Es un esfuerzo para detener el calentamiento global? ¿Es un intento por mejorar la salud pública? ¿Es una súplica desesperada para poner fin a la crueldad animal?
Le aseguro que la respuesta le sorprenderá. Este documental habla sobre una verdad incómoda en un mundo en el que todos se aprovechan de las buenas intenciones de los demás, desde médicos que se especializan en estilos de vida veganos hasta élites globales que hacen todo lo posible por imponer políticas para quitarles a las personas su derecho a decidir qué alimentos consumir.
Junto a otros expertos, que incluyen médicos, periodistas e incluso personas que dejaron atrás el veganismo, Vinnie Tortorich (experto en salud, director y coproductor) afirma que si bien aún tenemos el poder del libre albedrío, muy pronto eso podría cambiar si no hacemos algo al respecto”.
Las carnes de laboratorio contienen ingredientes poco saludables
Como se menciona en el documental, es muy difícil obtener todos los nutrientes que necesita de una dieta vegana, y aunque en teoría podría recurrir a un suplemento para solucionar este problema a corto plazo, necesitaría comprar muchos productos de alta calidad que incluyan vitamina B12, hierro, calcio, vitamina D, omega-3 y otras proteínas para evitar algunas de las deficiencias nutricionales más comunes por no consumir carne.
No obstante, como dijo Nina Teicholz, “muchas personas no pueden absorber las vitaminas y minerales del grupo B de los suplementos”. Además, las proteínas de origen vegetal son muy diferentes a las proteínas de origen animal. De hecho, ni siquiera son equivalentes a los alimentos enteros de origen vegetal. En palabras de Nina Tortorich:
“Lo peor de esta situación es que la carne de laboratorio ni siquiera contiene vegetales. Se fabrican a base de monocultivos e ingredientes como almidones, proteínas sintéticas y aceites de semillas”.
La carne “de origen vegetal” tampoco contiene los mismos aminoácidos y es más difícil de digerir que la proteína de la carne, por lo que satisfacer sus necesidades de proteínas para mantener sus músculos sanos podría volverse todo un desafío.
En cambio, la carne de laboratorio contiene proteínas sintéticas de las que hay poca información disponible. Por ejemplo, la marca Impossible Burger utiliza leghemoglobina de soya transgénica para darle el sabor a carne a su producto, pero aún no se realizan estudios sobre su efecto a largo plazo en la salud. Y eso no es todo, en el proceso de fabricación se producen otras proteínas como subproductos, que también se consumen y que necesitan una evaluación adicional.
La carne de laboratorio también contiene una gran cantidad de grasas dañinas
Por lo general, este tipo de carne también contiene el peor tipo de grasa que existe, es decir, grasas poliinsaturadas con niveles elevados de ácido linoleico y grasas monoinsaturadas con alto contenido de ácido oleico.
Por ejemplo, una porción de media libra de carne de res orgánica de animales alimentados con pastura proporcionará menos de medio gramo de ácido linoleico (500 mg). Mientras que una porción de Impossible Burger o Beyond Meat contiene de 10 a 20 veces más ácido linoleico.5 Por lo tanto, si a los alimentos procesados y ultraprocesados le sumamos la carga que representa la carne de laboratorio, el impacto en el metabolismo podría ser catastrófico.
Algunas carnes de laboratorio utilizan aceites que suelen considerarse "más saludables" como el aceite de oliva, pero eso no significa que no causarán efectos negativos, ya que las grasas monoinsaturadas son casi tan dañinas como los aceites de semillas. Cuando se consumen en exceso, las grasas monoinsaturadas, como el ácido oleico, causan resistencia a la insulina, promueven el almacenamiento de grasa y ralentizan la tasa metabólica.
Hace poco, entrevisté a Brad Marshall sobre el estrés reductivo, y creo que recopiló información muy completa sobre los efectos negativos del ácido oleico, que incluyen un mayor riesgo de obesidad y disfunción metabólica.
Un análisis más profundo de la relación entre el aceite de oliva y la obesidad demostró que su dinámica es muy compleja. A pesar de la popularidad del aceite de oliva, los estudios sugieren que casi no produce ningún beneficio en el índice de masa corporal (IMC).
Esto contradice la afirmación de que el aceite de oliva ayuda a combatir la obesidad. Sin embargo, los investigadores trataron de defender esta narrativa cuando, de manera bastante controversial, dijeron que la causa principal de los problemas de obesidad en las regiones mediterráneas eran los factores del estilo de vida, como el sedentarismo, y no los hábitos alimentarios. Por lo tanto, se realizaron experimentos para confirmar esta narrativa y los resultados demostraron que el aceite de oliva en la alimentación provocó resistencia a la insulina en ratones, lo que sugiere que podría dañar el metabolismo.
Otros estudios más completos utilizaron modelos animales para aislar los efectos del ácido oleico con el objetivo de controlar algunos compuestos del aceite de oliva, como los polifenoles y las grasas saturadas. Los resultados demostraron que el ácido oleico puro empeoró la resistencia a la insulina en ratones, lo que desataca las preocupaciones sobre su impacto en el metabolismo cuando se aísla de otros componentes que suelen encontrarse en el aceite de oliva.
Esto demuestra la complejidad sobre el impacto del aceite de oliva en la salud, lo que sugiere que los resultados beneficiosos podrían relacionarse más con su contenido de polifenoles y no con el aceite en sí.
El tema se complica aún más con los estudios que se enfocaron en la forma en que las grasas monoinsaturadas influyen en el metabolismo y el almacenamiento de grasas, en especial a través de mecanismos que involucran a las enzimas desaturasas, las cuales convierten las grasas saturadas en grasas monoinsaturadas. Estas enzimas, que se activan con las grasas monoinsaturadas de la alimentación, participan en la lipogénesis, que es el proceso que convierte los carbohidratos en ácidos grasos.
Esta vía biológica es crucial, ya que explica cómo las grasas influyen en los perfiles de lípidos y demuestra que existe una relación entre los diferentes tipos de grasas de la alimentación y la salud metabólica.
Información adicional sobre las dietas con alto contenido de grasas y bajas en carbohidratos
Como comentario adicional, en este documental, Nina Tortorich sugiere que la dieta ideal debe contener muy pocos carbohidratos, azúcares y granos. Hace uno o dos años estaría de acuerdo con su afirmación, pero después de mucho estudio entendí que esto es un grave error, ya que los carbohidratos son fundamentales para que nuestro metabolismo, función mitocondrial y producción de energía estén en óptimas condiciones.
Sin embargo, en el documental no hablan mucho sobre este tema, así que en este artículo tampoco entraré en más detalles. Hay que reconocer que Nina Tortorich tiene mucha razón con respecto a los beneficios de las grasas saturadas de origen animal, los huevos y los productos lácteos enteros, así como de la importancia de evitar los aceites de semillas y los alimentos procesados.
La carne de laboratorio no proporciona colágeno
Aunque en el documental tampoco se habla de este tema, un tercio de su proteína debe ser en forma de colágeno, y no existe ninguna fuente de origen vegetal que proporcione esta proteína tan importante. El colágeno es la proteína más común y abundante del cuerpo, y representa cerca del 30 % del total de proteínas. Una de sus funciones principales es ayudar a que los tejidos se estiren y flexionen mientras mantiene su integridad.
El colágeno se encuentra en la piel y los tejidos conectivos, como tendones, ligamentos, cartílagos, y fascia, así como en huesos, órganos, vasos sanguíneos, sistema musculoesquelético, cabello y uñas.
El colágeno también es crucial para la salud ósea y para recuperarse de las lesiones de los tejidos blandos, además, puede ayudar a mejorar el sueño, reducir el dolor en las articulaciones, mejorar la salud intestinal, la tolerancia a la glucosa y la presión arterial, así como reducir el daño cardiovascular, el riesgo de osteoporosis, la inflamación y el daño oxidativo.
Los aminoácidos principales del colágeno (glicina, prolina e hidroxiprolina) forman la matriz del tejido conectivo. La carne de res contiene muy pocos de estos aminoácidos, por lo que comer pura carne magra no le proporcionará los aminoácidos que necesita para desarrollar tejido conectivo fuerte y mantener una buena salud ósea. Dicho esto, la dieta vegana es aún peor, ya que los alimentos de origen vegetal contienen una cantidad mucho menor de estos aminoácidos que la carne roja.
La grasa de los productos lácteos también podría considerarse esencial
Otro alimento de origen animal que las alternativas veganas no pueden replicar son los lácteos enteros y sin pasteurizar. Según una investigación reciente,6 las grasas saturadas de cadena impar ácido pentadecanoico (C15:0) y el ácido heptadecanoico (C17:0), que se encuentran en los productos lácteos enteros, se podrían considerar uno de los tipos de grasa más beneficiosos en la dieta humana, y aunque aún no se reconocen como tal, creo que el C15:0 cumple con las características de las grasas esenciales.
En el 2020, un informe científico, titulado “Efficacy of Dietary Odd-Chain Saturated Fatty Acid Pentadecanoic Acid Parallels Broad Associated Health Benefits in Humans: Could It Be Essential?” afirmó lo siguiente:7
“Los ácidos grasos saturados de cadena impar de las fuentes alimentarias están presentes en forma de trazas en la grasa láctea y en algunos pescados y plantas. Las concentraciones circulantes más altas de OCFA, de ácido pentadecanoico (C15:0) y de ácido heptadecanoico (C17:0), podrían tener una relación con un riesgo menor de enfermedades cardiometabólicas, y un consumo mayor de OCFA podría tener relación con un menor índice de mortalidad.
Sin embargo, en los últimos años, los niveles circulantes de OCFA en toda la población han disminuido. Aquí, describimos el C15:0 como un ácido graso alimenticio activo, el cual ayuda a mitigar la inflamación, la anemia, la dislipidemia y la fibrosis in vivo, al adherirse a reguladores metabólicos esenciales y al restablecer la función de las mitocondrias.
Esta es la primera vez que se muestra el efecto directo del C15:0 en el riesgo de diversas comorbilidades, el cual se produce a través de mecanismos fisiológicos en concentraciones circulantes establecidas.
Si a nuestros hallazgos le sumamos la evidencia de que es difícil producir (1) C15:0 de forma endógena, así como el hecho de que no consumir lo suficiente y tener niveles bajos podría relacionarse con un mayor riesgo de mortalidad y un estado fisiológico deficiente, y que el(2) C15:0 mostró una efectividad y actividad que se relacionan con beneficios en la salud humana, entonces, podemos decir que el(3) C15:0 podría considerarse un ácido graso esencial”.
Estas alternativas a la carne representan una amenaza para la salud pública
Pero retomando el tema de la carne de laboratorio, es importante mencionar que este producto cumple con todos los requisitos para considerarse un producto ultraprocesado. Tal como lo dijo el Dr. Michael Hansen, científico sénior de Consumer Reports, las alternativas a la carne no son más que comida chatarra a base de ingredientes transgénicos y esteroides.8
La transición de alimentos reales de origen animal a alternativas hechas por el hombre no producirá ningún beneficio, sino todo lo contrario. Como se menciona en el documental, el perfil nutricional completo de la carne no puede replicarse de forma artificial, mientras que las investigaciones9 demuestran que dejar de comer carne y productos lácteos reales deteriora la salud. A mediados de abril de 2023, el portal Nutrition Insight informó lo siguiente:10
"Los investigadores señalan que la carne es una fuente de proteínas y nutrientes de alta calidad que son difíciles de obtener cuando no consume este alimento, y que la mayoría de las personas tienen niveles poco saludables e incluso una deficiencia.
‘Los alimentos de origen animal son superiores a los alimentos de origen vegetal, ya que proporcionan varios micronutrientes biodisponibles y macronutrientes de alta calidad que son fundamentales para el crecimiento y el desarrollo cognitivo’, dijo el Dr. Adegbola Adesogan, coautor y director del Global Food Systems Institute de la Universidad de Florida. Al parecer, las dietas que recomiendan que elimine los alimentos de origen animal no consideran este punto tan importante".
De hecho, como se menciona en este artículo,11 la anatomía, la digestión y el metabolismo son un ejemplo de que el cuerpo humano está diseñado para consumir carne, y no solo eso, sino que depende de este alimento para prosperar, lo que significa que hacer que toda la población cambie sus patrones alimentarios naturales, incrementa el riesgo de deficiencias de nutrientes y enfermedades crónicas. Según los autores:12
"Como matriz alimentaria, la carne es mucho más que la suma de sus nutrientes individuales".
Se ha demostrado que la carne roja sin procesar representa un riesgo muy bajo de reacciones adversas. Por otro lado, se sabe que las carnes de origen vegetal inhiben la absorción de minerales,13 lo que incrementa el riesgo de deficiencia de nutrientes.
La carne de laboratorio forma parte del plan para controlar el suministro de alimentos
La industria de la carne de laboratorio forma parte del plan para controlar nuestro suministro de alimentos. Las normas para la cría de animales son cada vez más estrictas para forzar su transición a granjas de insectos (que se conoce como microganado), alimentos transgénicos, carne de laboratorio y productos lácteos sintéticos, todo en nombre de combatir la hambruna, proteger el medio ambiente y revertir el cambio climático.
Durante años, el Foro Económico Mundial ha promovido la idea de que los alimentos de laboratorio y los cultivos transgénicos son la única forma de acabar con la hambruna y salvar el planeta. De hecho, la agricultura industrial utiliza el 75 % de las tierras agrícolas y solo produce el 30 % de los alimentos que se consumen en todo el mundo. Y utilizan esta impactante estadística para afirmar que necesitamos un sistema alimentario nuevo y más sostenible.
Sin embargo, lo que no dicen es que las pequeñas granjas biodiversas solo utilizan el 25 % de la tierra, pero proporcionan el 70 % de nuestra alimentación,14 lo que demuestra que eliminar la agricultura tradicional no es la solución para acabar con la hambruna en el mundo.
Es más, los estudios demuestran una y otra vez que, a diferencia de los monocultivos transgénicos, las prácticas agrícolas regenerativas y biodinámicas REDUCEN la demanda de recursos valiosos como el agua, no utilizan fertilizantes sintéticos y producen mayores rendimientos. También ayudan a reconstruir el suelo en lugar de destruirlo y promueve el bienestar animal y la biodiversidad de plantas y vida silvestre.
Cuando los animales se crían bajo prácticas regenerativas, se crea un ecosistema completo, que no solo beneficia a la tierra, sino también a los agricultores. Comer carne no es sinónimo de dañar el medio ambiente: son las prácticas que se utilizan para producirla lo que causa el daño.
Si el objetivo real fuera proteger el medio ambiente, combatir el cambio climático y optimizar la producción de alimentos y la nutrición humana, entonces la solución obvia sería hacer la transición a prácticas biodinámicas. En cambio, las pintan como si fueran el peor enemigo del planeta y la humanidad.
La agricultura regenerativa tiene una huella de carbono negativa
En 2019, la empresa Impossible Foods publicó un informe en el que atacó de forma directa a la ganadería regenerativa,15 al afirmar que produce más emisiones de gases de efecto invernadero que las operaciones concentradas de alimentación animal (CAFO).
Sin embargo, un análisis del ciclo de vida (LCA),16 que realizó la misma compañía que llevó a cabo el LCA de Impossible Burger, indicó que la huella de carbono de la carne de res de White Oak Pastures (una granja que utiliza prácticas regenerativas) es un 111 % menor que la de la carne de res de CAFO, ya que el "sistema absorbe el carbono del suelo, lo que compensa casi todas las emisiones que se relacionan con la producción de carne de res".
Tras considerar todos los aspectos, incluyendo las emisiones entéricas, las emisiones de estiércol, la captura de carbono del suelo, el carbono de las plantas, las actividades agrícolas, el sacrificio y el transporte de ganado, se encontró que las emisiones netas totales de carbono de la producción de carne de res de White Oak Pastures, tenían una emisión de carbono negativa de 3.5 kilos por kilo de carne fresca, lo que hace que este sistema integral y holístico tenga un eficiencia en el uso de carbono hasta seis veces mayor que el modelo de producción de CAFO.
Mientras tanto, la carne sintética a base de soya de Impossible Foods emite cantidades importantes de carbono. La carne de res de animales alimentados con pastura tiene un sumidero neto de carbono de 3.5 kg por kg de carne fresca, la soya convencional produce 2 kg de emisiones de carbono por cada kg de alimento y la proteína de chícharo (que Beyond Burger utiliza como sustituto de la carne) produce 4 kg de carbono por cada kg de alimento.17
Dicho todo esto, no entiendo cómo pueden decir que la carne de laboratorio es más amigable con el medio ambiente que las prácticas regenerativas. Además de que también emite carbono, la soya transgénica no regenera ni reconstruye los suelos, no protege nuestra población de insectos ni la vida silvestre, tampoco promueve la diversidad de plantas y mucho menos mejora la salud de los consumidores.
Todo lo contrario, el maíz y la soya, tanto convencional como transgénico, se están convirtiendo en monocultivos que están acabando con los pastizales y praderas de todo Estados Unidos, lo que podría tener el peor impacto ambiental jamás visto, ya que las praderas ayudan a retener el agua y absorber el carbono en el suelo.
Los sustitutos de la carne a base de células tampoco son una solución ecológica
Las carnes a base de células tampoco son una alternativa para proteger el medio ambiente. Según un estudio de ciencia y tecnología ambiental que se publicó en 2015, para crear la carne de laboratorio a base de células madre se requiere mucha más energía de la que utiliza la agricultura convencional. Según el resumen del estudio:18
"La carne de laboratorio o in vitro se compone de biomasa comestible que se produce a partir de células madre de animales en una fábrica o granja industrial. En las próximas décadas, el cultivo de biomasa in vitro podría permitir que se produzca carne sin la necesidad de criar ganado.
Con un marco anticipatorio de análisis del ciclo de vida, el estudio descrito en este documento examina las implicaciones ambientales de esta tecnología emergente y compara los resultados con los impactos publicados sobre la carne de res, cerdo, aves de corral y otro análisis especulativo de la biomasa creada.
Aunque los márgenes de incertidumbre son amplios, los hallazgos sugieren que, a diferencia del ganado, el cultivo de biomasa in vitro podría requerir menores cantidades de insumos agrícolas y tierra, pero esos beneficios podrían ser a expensas de un mayor uso de energía, ya que las funciones biológicas, como la digestión y circulación de nutrientes, tienen que remplazarse con equivalentes industriales.
Desde esta perspectiva, la producción a gran escala de carne in vitro y otros productos transgénicos podría representar una nueva fase de la industrialización con dilemas complejos y desafiantes".
Prefieren culpar a las vacas del cambio climáticos
Como se menciona en el documental, ahora se dice que las vacas son una de las principales fuentes de emisiones de metano, otro gas de efecto invernadero que, según se dice, está detrás del cambio climático. Por esta razón, como parte de su plan para combatir el cambio climático, los países de todo el mundo están implementando nuevos objetivos de emisiones para los ganaderos, que los obligará a reducir de forma drástica el tamaño de sus rebaños.
Sin embargo, existe mucha evidencia que demuestra que criar ganado en pastizales tiene un impacto muy beneficioso en el medio ambiente.19 En cambio, el cambio climático se relaciona, en gran parte, con la desertificación (cuando la tierra fértil se seca y se convierte en desierto), que es lo que causan las prácticas agrícolas convencionales que se utilizan en la actualidad.
Esta situación solo podrá revertirse si apoyamos la cría de ganado de pastoreo. En esencia, no es el número de vacas lo que causa el problema, al contrario, hay muy pocos animales y los que tenemos no se manejan de forma adecuada.
El metano que eructan las vacas termina convirtiéndose en dióxido de carbono y agua, que luego absorben las plantas, mientras que el carbono regresa al suelo a través de sus raíces. Este es el ciclo natural que beneficia a todos los seres vivos y al planeta. Sin embargo, cuando se habla sobre el cambio climático, nadie menciona esto.
Todo forma parte de un plan con objetivos oscuros
Lo más fácil sería suponer que todo se debe a la incompetencia de las personas que toman las decisiones. Sin embargo, no es tan simple, hay un plan oculto detrás de todas estas decisiones, que incluyen obligar a las granjas a cerrar, imponiéndoles restricciones radicales a los fertilizantes nitrogenados o a las emisiones de metano que producen las vacas, e incluso pagar a los agricultores para que no cultiven, sin importar la inminente escasez de alimentos.
Obligar a los agricultores y ganaderos a cerrar sus negocios solo es parte de su plan. De ese modo, podrán introducir su carne de laboratorio que les dará el control del suministro de alimentos de todo el mundo, algo que ya sucedió cuando Monsanto y otras compañías crearon sus semillas transgénicas patentadas.
Una vez que logren remplazar a los animales vivos con alternativas patentadas que se deriven de plantas, levaduras, bacterias, hongos o insectos, las compañías privadas controlarán todo el suministro de alimentos, y aquellos que sean dueños de las patentes controlarán el mundo. Los alimentos ultraprocesados ya representan el 58 % de la dieta promedio en los Estados Unidos,20 por lo que los globalistas tienen la esperanza de que lograrán alcanzar el 100 %.
Un alimento sintético jamás será más saludable que uno natural
Aquí algunos puntos importantes sobre todo lo que se mencionó en este artículo. El primero es que los alimentos sintéticos jamás serán más saludables que los alimentos naturales. El segundo es que la mayoría de las personas necesitan consumir alimentos de origen animal, ya que las proteínas de origen vegetal son muy diferentes a las proteínas de origen animal.
Las proteínas de origen vegetal tampoco ayudan a satisfacer su necesidad de colágeno. Las grasas de origen vegetal tampoco pueden remplazar las grasas (que podrían considerarse esenciales) que proporcionan los productos lácteos enteros. Como se mencionó, la grasa que contienen la mayoría de las alternativas sintéticas son aceites de semillas baratos, que son una de las causas principales de las enfermedades crónicas, ya que alteran la función de las mitocondrias.
El tercer punto es que la creación de la carne de laboratorio tiene objetivos geopolíticos y forma parte de un plan para controlar a la población. Los globalistas tecnocráticos que financian la industria de la carne de laboratorio tienen un plan oculto y solo utilizan la ideología vegana a su conveniencia.
Por último, los alimentos naturales son fundamentales para tener una salud óptima. La carne de laboratorio no es más que otro alimento ultraprocesado, por lo que no es la solución a los problemas de salud que causan otros alimentos ultraprocesados. Nuestra libertad y seguridad alimentaria depende de nosotros mismos, por esa razón debemos luchar por un sistema descentralizado que conecte a las comunidades con los agricultores que cultivan alimentos reales, de manera sostenible y que los distribuyen en su localidad.
🔍Fuentes y Referencias
- 1 The BMJ, 2024; 384:e077310
- 2 Alzheimer's Association, August 3, 2022
- 3 Cell Metabolism 2023;35(4), Summary
- 4 YouTube Gravitas Documentaries, Beyond Impossible
- 5 Bohrer, GM. Food Science and Human Wellness Volume 8, Issue 4, December 2019, Pages 320-329
- 6, 7 Scientific Reports 2020; 10: 8161
- 8 Organic Insider June 8, 2022
- 9, 11, 12 Animal Frontiers April 15, 2023
- 10 Nutrition Insight April 17, 2023
- 13 Nutrition Insight December 9, 2022
- 14 Independent Science News June 18, 2019
- 15 Impossible Foods 2019 Impact Report
- 16 Quantis, Carbon Footprint Evaluation of Regenerative Grazing at White Oak Pastures, February 25, 2019
- 17 Civil Eats June 19, 2019
- 18 Environmental Science and Technology 2015 Oct 6;49(19):11941-9
- 19 Cowboy State Daily June 2, 2023
- 20 BMJ Open 2016; 6:e009892