📝HISTORIA EN BREVE
- El cortisol, que también se conoce como la hormona del estrés, es fundamental para la salud. Sin embargo, el problema es que en exceso puede causar problemas de salud graves, como degradación muscular, inflamación y deterioro de la función inmunológica. Por esta razón, es muy importante entender bien la interacción entre el cortisol, el cerebro y el cuerpo
- Los ejercicios de alta intensidad y larga duración, como correr largas distancias, incrementan de forma constante los niveles de cortisol, lo que provoca que el cuerpo entre en un estado de estrés crónico
- La enzima 11β-HSD1, que se encuentra en casi todos sus tejidos, es fundamental para producir cortisol, y es clave para entender y tratar los niveles elevados de cortisol que se relacionan con enfermedades metabólicas
- Mientras que las compañías farmacéuticas trabajan en inhibidores de la enzima 11β-HSD1 para tratar las enfermedades que se relacionan con los niveles elevados de cortisol, ya existen alternativas como la aspirina, la emodina y la progesterona que podrían ser una estrategia natural y accesible para este mismo propósito, ya que las tres inhiben la actividad de 11β-HSD1
- Para controlar los niveles de cortisol en los tejidos, reduzca la cantidad de ejercicio de resistencia que realiza, consuma suficientes carbohidratos saludables y tome progesterona
🩺Por el Dr. Mercola
Muchas veces, un análisis de sangre no es suficiente para determinar que el cuerpo tiene niveles elevados de estrés, lo que se traduce en un mayor riesgo de problemas de salud. Hay investigaciones en curso para encontrar formas de controlar este problema y comprender mejor el efecto de los cambios en el estilo de vida, como el ejercicio.
Hace poco, Georgi Dinkov (experto en bioenergía) habló en su blog sobre una investigación1 que demuestra que los ejercicios de resistencia hacen que el cuerpo entre en un estado de hipercortisol. En otras palabras, algunos ejercicios, como correr largas distancias, provocan que el cuerpo entre en un estado de estrés crónico, y eso daña la salud.
Mantener niveles elevados de cortisol representa una amenaza para la salud
El cortisol es una hormona del estrés y, aunque es fundamental para la salud, en exceso puede causar daños importantes. El cortisol regula los niveles de azúcar cuando están bajos, el problema es que lo hace a expensas de los músculos, los huesos y el cerebro.
Absorbe compuestos importantes de la masa muscular magra para liberar aminoácidos que su hígado convierte en glucosa, en un proceso que se conoce como gluconeogénesis. Esto significa que mantener niveles elevados de cortisol incrementará la inflamación y dañará la función inmunológica.
El cortisol también influye mucho en el envejecimiento. Por lo tanto, mantener niveles elevados de cortisol también incrementa el riesgo de muerte prematura debido a su efecto catabólico, es decir, que descompone los tejidos. Para un envejecimiento saludable, necesita que su cuerpo esté en un estado anabólico, así como desarrollar tejidos sanos, como músculos y mitocondrias, algo que no logrará si tiene niveles elevados de cortisol.
Los mecanismos de retroalimentación del cortisol
Es importante mencionar que el cortisol produce efectos diferentes según la parte del cuerpo en la que se encuentre, esto debido a que tiene diferentes mecanismos de retroalimentación.2 Por ejemplo, hay un mecanismo central en el cerebro que suele decirle a su cuerpo que produzca menos cortisol porque ya hay suficiente (retroalimentación negativa).
Sin embargo, fuera del cerebro (retroalimentación periférica), el mecanismo funciona de manera opuesta (retroalimentación positiva). Esto significa que, en estas partes del cuerpo, los niveles elevados de cortisol pueden provocar que se produzca aún más.
También hay una diferencia entre los niveles de cortisol en la sangre y los tejidos. Incluso si los análisis de sangre muestran niveles normales o bajos, podría tener niveles elevados en los tejidos.
En este caso, podría ser el efecto de la enzima llamada 11β-HSD1, la cual ayuda a producir cortisol y se encuentra en casi todo su cuerpo. Es el paso limitante en la síntesis de cortisol y, como dijo Georgi Dinkov, la evidencia sugiere que la actividad de la enzima 11β-HSD1 en los tejidos (no solo los niveles de cortisol en la sangre) es un buen indicador del riesgo de diabetes tipo 2. Georgi Dinkov también dijo lo siguiente:3
"Esta diferencia entre el mecanismo de retroalimentación periférico y central del cortisol podría ser una de las razones por la que la mayoría de los especialistas en endocrinología no quieren admitir que el cortisol es uno de los factores de riesgo principales en enfermedades como la diabetes tipo 2, incluso cuando los niveles de cortisol en la sangre de estas personas son normales o bajos.
No obstante, muchos estudios demuestran que los niveles de 11β-HSD1 no solo predicen el riesgo de obesidad y diabetes, sino también el estado de la diabetes cuando ya está presente".
Cuando está bajo mucho estrés o hace cambios en su alimentación (como ayunar o llevar una dieta baja en carbohidratos), comienza a producir más cortisol, lo que incrementa los niveles de esta enzima y estimula aún más la producción de cortisol. Por lo tanto, entra en un círculo vicioso.
Llevar una dieta cetogénica por mucho tiempo también puede incrementar de forma crónica los niveles de cortisol
Esta es otra de las razones por las que ya no recomiendo la dieta cetogénica a largo plazo o el ayuno prolongado, sobre todo si tiene una buena flexibilidad metabólica. Cuando no tiene suficiente glucosa para alimentar las mitocondrias, y tiene niveles muy bajos de glucógeno, se liberan hormonas del estrés (adrenalina y cortisol) en un intento por estimular la producción endógena de glucógeno.
Esas hormonas del estrés son patológicas y, cuando se liberan de forma continua en niveles elevados para compensar la falta de glucosa, incrementan el riesgo de enfermedades y muerte prematura.
El efecto del ejercicio en los niveles de cortisol
En la actualidad, muchas compañías farmacéuticas trabajan en inhibidores de la enzima 11β-HSD1 para tratar las enfermedades que se relacionan con los niveles elevados de cortisol en los tejidos, como la obesidad y la diabetes. Sin embargo, la evidencia sugiere que ciertos tipos de ejercicio también pueden incrementar los niveles de 11β-HSD1 en los tejidos, lo que también incrementa los niveles de cortisol en estas partes del cuerpo. Según Georgi Dinkov:
"Cuando se confirmó que los niveles elevados de cortisol son patológicos (sobre todo para enfermedades metabólicas), muchas compañías farmacéuticas comenzaron a realizar ensayos clínicos con inhibidores de 11β-HSD1 para tratar la obesidad, la diabetes, la demencia, la sarcopenia e incluso la enfermedad de Cushing.
Una de las críticas que más escucho por parte de los especialistas en endocrinología sobre el mecanismo de retroalimentación positiva del cortisol periférico es que casi toda la evidencia proviene de experimentos in vitro.
El estudio in vivo4 [que se publicó en el Journal of Applied Physiology en octubre de 2017] pone fin a esta crítica, ya que demuestra que correr todos los días durante unas semanas duplicó la expresión de 11β-HSD1 en los tejidos, lo que vuelve a confirmar que incluso el estrés "beneficioso", como el ejercicio de "resistencia", es suficiente para causar un estado periférico de cortisol alto que podría mantenerse incluso después de dejar de hacer ejercicio, ya que no se sabe si los niveles de 11β-HSD1 pueden estabilizarse por sí solos".
Aunque el medicamento RU486 puede ayudar a reducir los niveles de cortisol en los tejidos, es casi imposible de conseguir. La buena noticia es que existen otras sustancias, como la aspirina, la emodina y la progesterona, que también inhiben la actividad de la 11β-HSD1, lo que reduce los niveles de cortisol en los tejidos. Además, estimulan la enzima 11β-HSD2, que desactiva el cortisol. Entonces, reducen los niveles de cortisol a través de estas dos vías.
Los beneficios de la progesterona
De estas tres, la progesterona podría considerarse la mejor opción, ya que también produce otros beneficios. Es una de las cuatro hormonas que, en mi opinión, podrían beneficiar a la mayoría de los adultos. (Las otras tres son la hormona tiroidea T3, DHEA y pregnenolona). Recomiendo que tome de 30 a 50 mg de progesterona bioidéntica al día, por la noche antes de acostarse, ya que también puede mejorar el sueño.
Para incrementar su biodisponibilidad, mezcle la progesterona con vitamina E natural. La diferencia de biodisponibilidad entre tomar progesterona por vía oral sin vitamina E y con vitamina E es de 45 minutos contra 48 horas. Otra razón para tomar progesterona con vitamina E es porque se adhiere a los glóbulos rojos, lo que permite que la progesterona se transporte por todo el cuerpo y llegue a donde más se necesita.
El producto Simply Progesterone de Health Natura es una gran opción, ya que contiene progesterona, vitamina E y aceite de MCT. También puede preparar su propia mezcla, solo disuelva polvo puro de progesterona USP en una cápsula de vitamina E de alta calidad. Cincuenta miligramos de progesterona en polvo equivalen a casi 1/32 de cucharadita.
No utilice vitamina E sintética (acetato de alfa tocoferol; la palabra acetato indica que la vitamina es sintética). La vitamina E natural se etiqueta como "d alfa tocoferol", este es el isómero D puro, que es lo que su cuerpo puede utilizar. También contiene otros isómeros de vitamina E, y lo que necesita es el espectro completo de tocotrienoles, sobre todo los tipos beta, gamma y delta de vitamina E, en el isómero D efectivo.
No recomiendo la progesterona transdérmica, ya que su piel tiene niveles elevados de la enzima 5-alfa reductasa, lo que hace que gran parte de la progesterona que está tomando se convierta en alopregnanolona y no pueda volver a convertirse en progesterona.
Por el contrario, si la toma por vía oral con vitamina E como disolvente, una gran parte no se metabolizará, y esa progesterona que no se metaboliza daña la tiroides. También es un esteroide termogénico. Debido a que estimula el desacoplamiento, producirá más calor, que es uno de los efectos de tomar la T3.
A pesar de no ser tan potente como tomar la T3, podría incrementar su tasa metabólica en un 10 %. Además de bloquear el cortisol, la progesterona también ayuda a desactivar la adrenalina, otra hormona del estrés. Como dijo Georgi Dinkov en una entrevista sobre el remplazo hormonal:
"Hay estudios en humanos que demuestran que cuando se administra progesterona, incluso en su forma no óptima, como es el polvo sin ácidos grasos de cadena larga ni tocoferoles, incluso en esa forma, una sola dosis de 100 a 200 mg es suficiente para reducir los niveles de cortisol y adrenalina en hasta un 60 %".
Conclusión
La conclusión de todo esto es que los ejercicios de resistencia pueden ser contraproducentes porque incrementan de forma crónica los niveles de cortisol, y eso acelera el proceso de envejecimiento. Otras investigaciones también demuestran que realizar entrenamiento de resistencia, como triatlones, cuando tiene entre 40 y 50 años, incrementa el riesgo de fibrilación auricular entre un 500 % y un 800 %.
Una vez que llega a los 40 y 50 años, debe bajar un poco la intensidad del ejercicio y solo hacerlo por diversión, no para competir.
Otra conclusión es que puede tener niveles elevados de cortisol incluso si todo parece normal en su análisis de sangre, esto debido a la presencia de 11β-HSD1, que estimula la producción de cortisol en casi todos los tejidos. Para mantener los niveles de cortisol bajo control, considere estas estrategias:
- Reducir la cantidad de ejercicio de resistencia que realiza.
- Consumir suficientes carbohidratos saludables y pocas grasas (lo ideal es mantener el consumo de grasas por debajo del 35 % para evitar que alteren el metabolismo de la glucosa en la cadena de transporte de electrones de las mitocondrias).
- Tomar progesterona, de preferencia junto con vitamina E natural de alta calidad.