📝HISTORIA EN BREVE
- El centro Hope4Cancer proporciona un enfoque completo y personalizado para el tratamiento contra el cáncer, enfocado en siete principios esenciales: terapias sin toxicidad contra el cáncer, inmunomodulación, alimentación, desintoxicación, oxigenación y restauración del microbioma intestinal, así como aspectos espirituales y emocionales de la sanación
- Las terapias contra el cáncer que no son tóxicas incluyen: terapia de campos electromagnéticos pulsados, terapias antimicrobianas, antiinflamatorias y antiangiogénicas (como la hipertermia y de luz del infrarrojo cercano), así como terapias biológicas por vía intravenosa (como la vitamina C y laetrile)
- El 92 % de los pacientes del centro Hope4Cancer llegan con cáncer etapa 4 o tiene algún tipo de cáncer metastásico avanzado
🩺Por el Dr. Mercola
El cáncer ha alcanzado proporciones epidémicas en todo el mundo. En los Estados Unidos, se estima que cada día fallecen 1670 personas a causa del cáncer.1
En este artículo, el Dr. Antonio Jimenez, autor del libro titulado Hope4Cancer: Seven Key Principles to Remove Fear and Empower Your Healing Journey, comparte su filosofía sobre el tratamiento contra el cáncer.
Hope4Cancer también es el nombre de sus centros integrativos de tratamiento contra el cáncer, ubicados en México.2
El catalizador del protocolo de tratamiento que desarrolló Jiménez fue el diagnóstico de cáncer de próstata en etapa 3 que recibió su padre cuando tenía poco más de 60 años. A pesar de este diagnóstico, el padre del Dr. Jiménez vivió otras dos décadas y murió de una enfermedad cardíaca a la edad de 82 años. El Dr. Jiménez
Una tasa de éxito sorprendentemente alta para el tratamiento alternativo contra el cáncer
El 92 % de los pacientes del centro Hope4Cancer llegan con cáncer en etapa 4 o padecen algún cáncer metastásico avanzado.
A pesar de eso, una revisión realizada por una tercera entidad, sobre 365 registros de pacientes seleccionados al azar, reveló que el centro tenía una tasa de supervivencia del 76 % para dos años, mientras que los datos extrapolados sugirieron que la tasa de supervivencia de cinco años aún debería estar en el rango del 70 %.
Es evidente que esto contrasta con los datos del Programa de Vigilancia, Epidemiología y Resultados Finales (SEER, por sus siglas en inglés) del Instituto Nacional del Cáncer, que demuestran que el tratamiento convencional contra el cáncer podría tener una tasa de supervivencia del 25 % para cinco años.3 Según Jiménez:
“Estábamos muy emocionados por este descubrimiento. Todos los días somos bendecidos con pacientes que mejoran cada vez más. Considero que ahora las personas se encuentran más informadas y están dispuestas a hacer esos cambios de estilo de vida. Esto les ha brindado el poder para sanarse y lo han logrado”.
Los siete principios esenciales de la terapia contra el cáncer
El centro Hope4Cancer proporciona un enfoque completo y personalizado para el tratamiento contra el cáncer, el cual se enfoca en siete principios esenciales:4
- Terapias sin toxicidad contra el cáncer, como la terapia de campos electromagnéticos pulsados (PEMF), terapias antimicrobianas, antiinflamatorias y antiangiogénicas, como la hipertermia y terapia de luz del infrarrojo cercano, además de las terapias biológicas por vía intravenosa, como la vitamina C y laetrile
- Inmunomodulación
- Alimentación, incluyendo dietas y suplementos nutricionales
- Desintoxicación por medio de enemas de café, jugos de vegetales, PEMF, terapia vibratoria, hierbas y sauna del infrarrojo cercano
- Oxigenación, incluyendo ozonoterapia y oxigenoterapia hiperbárica
- Restauración del microbioma intestinal
- Aspectos de la sanación espiritual y emocional
Como señaló Jiménez, “seis de estos principios, con la excepción de las terapias sin toxicidad contra el cáncer, pueden aplicarse en todas las personas. El tratamiento radica en la prevención”. El centro Hope4Cancer también proporciona un seguimiento de tratamiento en el hogar, que en verdad es crucial.
Por lo regular, los pacientes permanecen en el centro de tratamiento durante tres a seis semanas, pero eso no significa que se encuentren curados en ese momento.
Durante su estadía, reciben un programa personalizado y aprenden cómo implementarlo. Sin embargo, todavía tienen que continuarlo después de llegar a su hogar. En algunos casos, también se emplean terapias convencionales contra el cáncer.
De acuerdo con Jiménez:
"Es muy importante implementar estos siete principios esenciales para integrar un programa con un efecto verdaderamente holístico.
Dicho lo anterior, somos médicos. Pero en mi caso, también soy naturópata. A menudo, tenemos que hacer algunas terapias convencionales para detener esta carga tumoral agresiva.
Por ejemplo, si un paciente llega con un tumor de Pancoast, que es un tumor que se localiza en la parte superior del pulmón y que bloquea la circulación al cerebro. Si no se le realiza una radiación por zona en cinco sesiones, para disminuirlo, el paciente no sobrevivirá. Hay pocas indicaciones, pero también hay algunas que son específicas para la radiación.
El dolor es otra cuestión. Prefiero dar de cinco a siete radiaciones por zona en el hueso para disminuir el dolor, lo cual podría disminuir la probabilidad de que el hueso se fracture o se rompa, en lugar de que ese paciente tome narcóticos u otro medicamento para controlar un dolor fuerte...
Después de más de 25 años de trabajar en un campo integrativo, quiero promover el empoderamiento y que esta información esté disponible, de modo que si le acaban de diagnosticar cáncer, está en etapa 4 y no le han ayudado las terapias convencionales, [sabrá que] hay otras opciones.
Siempre habrá opciones. Esa es una de las razones principales por las que escribí este libro, ‘Hope4Cancer’.
Creo que uno de los problemas de la frustración en el ámbito de la oncología es que una vez que los médicos convencionales terminan con la quimioterapia, radiación y cirugía, ya no saben qué más hacer... eso es todo. Se quedan sin opciones, por lo que el paciente siente frustración, desesperanza y es ahí cuando acuden con nosotros".
La restricción de proteína animal podría mejorar la función inmunológica en pacientes con cáncer
El centro Hope4Cancer incluye casi todos los principios que sé que podrían ser beneficiosos y algunas estrategias que desconocía.
Jiménez y yo pertenecemos a la Academy for Comprehensive and Integrative Medicine (ACIM), que es donde lo conocí por primera vez. El Dr. Thomas Seyfried, uno de los mejores biólogos del cáncer a nivel mundial, a quien he entrevistado varias veces, también pertenece a este organismo.
Ahora, muchos de los principios metabólicos de Seyfried son adoptados por especialistas en el cáncer, al igual que en el centro Hope4Cancer. Esto incluye restringir la proteína animal en la fase inicial del tratamiento. El fundamento de esta estrategia es que la proteína animal puede estresar la función inmunológica.
Jiménez hace hincapié en implementar un “programa de alimentos de huerto”, que se centra en alimentos completos, sin transgénicos y fáciles de digerir. Si bien no recomiendo el veganismo, si padece un cáncer agresivo y terminal, probablemente sería prudente evitar la proteína animal por un tiempo y enfocarse en alimentos más ligeros que no desencadenen respuestas inflamatorias. También, podría ser recomendable evitar las lectinas, ya que se sabe que podrían causar inflamación. Jiménez lo explica de la siguiente manera:
"En mi experiencia, el sistema inmunológico de los pacientes con cáncer es un tema de suma importancia. Sabemos cuál es la razón para esto. A las células cancerígenas les gusta evadir el sistema inmunológico. Podríamos tener un sistema inmunológico óptimo, pero el cáncer se apropia de las células.
Esa es una característica distintiva del cáncer según Seyfried. Las células cancerígenas han encontrado una forma de protegerse u ocultarse para evitar ser percibidas por el sistema inmunológico.
Un tumor tiene dos tipos de células. Las células cancerígenas no estaminales que constituyen alrededor del 99 % del total de las células en un tumor maligno, masa o nódulo de ganglio linfático. El 1 % es denominado como células madre cancerígenas. Se encuentran en el tumor primario y pertenecen a la variante epitelial; es decir, son células madre de cáncer epitelial.
Abandonan el tumor primario y se dirigen a la matriz extracelular, luego entran en el torrente sanguíneo. Así es como la mayoría de los tipos de cáncer se diseminan... Se transforman de células madre epiteliales en mesenquimales.
De esa manera, pueden penetrar las paredes de los vasos sanguíneos, y una vez que se encuentran en el torrente sanguíneo es cuando se les denomina células tumorales circulantes, porque ahora circulan libremente en el suministro de sangre.
Estas células tumorales circulantes forman un émbolo o paro celular que se fija en la pared interna del vaso sanguíneo. Ahora, hay una segunda transición de células madre mesenquimales a células madre epiteliales de cáncer y, cuando salen del vaso sanguíneo, desencadenan la metástasis; es decir, el cáncer de mama se extiende al hígado, pulmón, cerebro y huesos.
Aquí lo interesante es que el 80 % de la investigación que se desarrolla sobre el cáncer se basa en el tumor primario.
Pero ¿cuál es la causa de la muerte de un paciente con cáncer? Rara vez, con algunas excepciones, se trata del tumor primario; la causa es la actividad metastásica. Hay una confusión y deberían invertirse más fondos y energía en investigar el proceso de metástasis, y no en investigar sobre el tumor primario.
Dicho lo anterior, en el centro Hope4Cancer tenemos una tecnología llamada 'espectroscopia infrarroja fotodinámica'. Esta consiste en utilizar luz del infrarrojo y un sensibilizador... llamado verde de indocianina... que es administrado por vía intravenosa.
Este se adhiere a las células tumorales circulantes. Luego, el volumen de sangre total es verificado en 17 minutos. Captará cualquier célula tumoral circulante en la sangre. Posteriormente, por medio de la luz del infrarrojo, podemos destruir y atacar a las células tumorales circulantes".
La importancia de las terapias metabólicas
El concepto básico del cáncer como enfermedad metabólica es que las células cancerígenas son metabólicamente distintas a las células sanas. Tienen mitocondrias disfuncionales, lo que podría deberse a un sin número de razones, pero por lo general se debe a factores estresantes oxidativos.
A raíz de esto, las mitocondrias que se encuentran en las células cancerígenas son incapaces de quemar combustible de forma normal, por medio de oxígeno… aunque haya oxígeno presente. En cambio, vuelven a hacer la fermentación para producir energía, lo cual es relativamente ineficiente, pero permite que las células cancerígenas sobrevivan y se dividan.
Las terapias metabólicas aprovechan esta característica y básicamente privan a las células cancerígenas de combustible, que en su mayoría consiste en glucosa, pero también glutamina, un aminoácido que se encuentra en las proteínas.
Esto ocurre al disminuir de forma significativa los niveles de glucosa en la sangre, por lo general a través del ayuno. Así mismo, esto eleva los niveles de cetonas, que además de ser un combustible ideal y preferido por la mayoría de las células sanas, también es antiinflamatorio.
La luz tiene múltiples aplicaciones valiosas en la terapia contra el cáncer
Una vez realizado el proceso anterior, se pueden incluir otras terapias, como la terapia de ozono, oxigenoterapia hiperbárica y terapia de potenciación de la insulina (IPT), esta última podría disminuir aún más el azúcar en la sangre para matar de hambre a las células cancerosas. Así mismo, Jiménez enfatiza el uso de la luz:
"La luz es muy importante. Por ejemplo, la luz roja promueve los macrófagos, los activa mucho más e incrementa su capacidad para consumir células y virus cancerosos...
La luz roja también puede mejorar la oxigenación en los tejidos y la microcirculación saludable. La luz verde puede disminuir la viscosidad de la sangre, que es la aglomeración de células para que los glóbulos rojos no puedan transferir oxígeno al tejido. Además, con la luz verde observamos un incremento en la energía celular y optimización de la función mitocondrial.
Con respecto a la luz azul, la utilizamos para promover la producción de óxido nítrico y mejorar la actividad de la telomerasa... ya que los pacientes con cáncer tienen telómeros más cortos. A medida que envejecemos, esos telómeros disminuyen su tamaño. Sin embargo, la luz azul ha demostrado alargar los telómeros.
Tenemos diferentes formas de realizar la terapia fotodinámica o de fotobiomodulación, que utiliza luz de espectro completo, desde infrarrojo hasta ultravioleta... Contamos con dispositivos infrarrojos que pueden utilizarse de forma externa... lo cual es muy bueno para tumores externos y los que son palpables...
La terapia de luz o terapia fotodinámica por vía intravenosa es una innovación reciente... hay una gran cantidad de sustancias, incluyendo la vitamina C, curcumina y el extracto de hierba de San Juan, cuyo efecto mejora y se máxima por la luz...
Cuando alguien recibe curcumina por vía intravenosa, entonces le proporcionamos luz azul, lo cual incrementa el efecto, esto ayuda a las células cancerosas a producir especies reactivas del oxígeno (ROS) que son tóxicas para este tipo de células.
Al mismo tiempo, se le suministra ozono, o es premedicado, por decirlo de alguna manera, con oxígeno hiperbárico, para generar efectos sinérgicos".
Jiménez también emplea la terapia de luz junto con el ayuno, IPT y quimioterapia de dosis baja, ya que muchos agentes quimioterapéuticos también son sustancias fotoactivas. Según lo explica Jiménez:
"Cuando realizamos el proceso de IPT, se colocan dos catéteres en una vena. Por medio de uno se realiza la quimioterapia con dosis baja y por el otro se le suministra la luz. Entonces, potencia aún más el efecto de la quimioterapia".
Antes de este procedimiento, los pacientes ayunan durante un mínimo de 12 a 16 horas, en función del padecimiento del paciente.
Terapia laetrile
Otra terapia utilizada en el centro Hope4Cancer es la amigdalina, también conocida como laetrile B17, una terapia desarrollada por el Dr. Harold W. Manner en la Universidad de Loyola. Jiménez explica su uso:
"Al hacerlo por vía intravenosa, evitamos el intestino. Empleamos de 3 a 9 gramos de amigdalina o laetrile B17 a través de una infusión por vía intravenosa. Este procedimiento continúa siendo nuestro procedimiento básico en la terapia contra el cáncer.
Recuerdo que, cuando comencé a trabajar en oncología integrativa en 1988, recurríamos al laetrile, a la alimentación y, a menudo, al cartílago de tiburón... Y muchos pacientes se recuperaron.
Ahora, por supuesto que sabemos que las personas están más intoxicadas en todos los sentidos, desde el aspecto emocional hasta el físico. El laetrile aún tiene un rol muy importante; sin embargo, lo utilizamos más como una terapia [adjunta] y no como una terapia principal".
Información adicional
Para obtener más información, asegúrese de obtener una copia del libro “Hope4Cancer: Seven Key Principles to Remove Fear and Empower Your Healing Journey”. Jimenez describe este libro de la siguiente manera:
"Por favor, aproveche este libro. En este, hablamos de los fundamentos del cáncer y la sanación. Abordamos el tema del cáncer. ¿Cuáles son sus causas? ¿Cómo podemos diagnosticarlo, analizarlo y monitorearlo? Y luego entramos en materia de terapias. Es una combinación de muchísimos años de trabajo, experiencia y viajes por el mundo".
También, podrá encontrar una gran cantidad de material educativo en el sitio web del centro de tratamiento: Hope4Cancer.com. De igual manera, encontrará un PDF (en inglés) que puede imprimirse y que resume los siete principios esenciales de la terapia contra el cáncer.5
Las consultas son gratuitas. Además, el centro puede discutir las opciones de tratamiento con su oncólogo, si así lo desea. Incluso, los consejeros para la admisión en el centro cuentan con listas de pacientes que han dado su permiso para proporcionar sus nombres e información de contacto, por lo que realmente podrá hablar con alguien que haya realizado el programa y que haya emprendido esta travesía.
El 75 % de los pacientes de los Centros de Tratamiento Contra el Cáncer de Hope4Cancer en México (Tijuana y Cancún) provienen de los Estados Unidos y ambos lugares tienen personal que habla inglés. Alrededor del 10 % de los pacientes provienen de Canadá y el resto proviene de todo el mundo. El Dr. Jiménez concluye con lo siguiente:
"Algo que es muy importante es que no debemos olvidarnos de los pacientes que se encuentran en remisión u observación cautelosa. Ese es el momento cuando realmente tienen que ser proactivos, ¿qué esperan? ¿Acaso esperan que el cáncer aparezca nuevamente en una exploración PET o CAT?
Este es el momento en que debe aplicar los siete principios esenciales y hacer la prueba de espectroscopia infrarroja fotodinámica para buscar células tumorales circulantes y luego atenderlas.
Recuerde que el cáncer no es una sentencia de muerte... No importa qué tan avanzada sea la etapa que le haya diagnosticado su médico, siempre hay esperanza para tratarlo. Lo digo de verdad y con honestidad, porque lo he visto.
He visto pacientes que llegan en sillas de ruedas, algunos en camillas, que luego salen caminando y tienen una vida larga y saludable. Nunca se dé por vencido. Juntos podemos vencerlo".