HISTORIA EN BREVE

  • Enjuagar las fosas nasales con una solución salina dentro de las 24 horas posteriores a un diagnóstico de COVID-19, podría reducir hasta 8.5 veces el riesgo de hospitalización
  • A diferencia del 42 % de las personas con COVID-19 que realizaron la irrigación nasal con menor frecuencia, el 80 % de aquellos que la realizaron dos veces al día no presentaron síntomas o sus síntomas fueron muy leves
  • Solo el 13 % de las personas que realizaron la irrigación nasal presentaron síntomas hasta el día 28, mientras que en el otro estudio el porcentaje fue del 50 %
  • Otra investigación también respalda el uso de la irrigación nasal como un "complemento útil para los tratamientos de primera línea para combatir el COVID-19"
  • La mayoría de las personas también puede utilizar peróxido de hidrógeno nebulizado y diluido con solución salina, con o sin yodo, para prevenir las infecciones respiratorias y, en algunos casos, tratar la infección activa

Por el Dr. Mercola

Enjuagar las fosas nasales con una solución salina dentro de las 24 horas posteriores a un diagnóstico de COVID-19 podría reducir hasta en 8.5-veces el riesgo de hospitalización.1 Entonces ¿por qué su médico no le ha comentado nada al respecto? Y ¿por qué las agencias de salud pública no le han dicho al público que un simple lavado nasal puede reducir bastante el riesgo de enfermedad grave por COVID?

La respuesta a estas preguntas es bastante simple, se trata de una solución que casi no produce ganancias, ya que a diferencia del medicamento Paxlovid de Pfizer, el cual recibió la autorización de uso de emergencia para tratar el COVID-19 de leve a moderado2 y que se espera que para 2022 genere hasta $ 22 mil millones en ganancias,3 esta antigua práctica del lavado no cuesta casi nada.

Además, si hubieran implementado esta estrategia, la historia de la pandemia hubiera sido completamente diferente, lo que significa que jamás se hubieran necesitado todas las estrategias que utilizaron para controlar la pandemia.4

Una forma muy sencilla de reducir el riesgo de hospitalización por COVID

La irrigación nasal, que también se conoce como lavado nasal, es un método popular para aliviar los síntomas del resfriado y suele involucrar el uso de una olla neti. Esta práctica es una técnica antigua que proviene del sistema de atención médica tradicional de la India.

La irrigación de las fosas nasales con solución salina también se utiliza en la práctica del yoga tradicional, donde se conoce como jala-neti,5 y consiste en colocar solución salina en un dispositivo similar a una tetera, que se utiliza para enjuagar la nariz y las cavidades de los senos paranasales. Después de insertar el extremo de la olla en un lado de la nariz, la solución se mueve alrededor de los senos nasales y sale por la otra fosa nasal, también se puede usar una jeringa de pera o una botella comprimible.

En los Estados Unidos, la irrigación nasal se utiliza como terapia complementaria para las enfermedades de las vías respiratorias superiores y, en la actualidad, también se prescribe para el cuidado posterior a las cirugías de los senos nasales.6 El estudio que se publicó en la revista Ear, Nose & Throat en agosto de 2022, involucró a 79 participantes de 55 años en adelante con COVID-19.7

Se seleccionaron al azar para utilizar media cucharadita de bicarbonato de sodio (alcalinización) con el enjuague de solución salina isotónica (solución salina al 0.9 %), dos veces al día, durante 14 días, o tomar 2.5 mililitros (casi media cucharadita) de solución de povidona yodada (PVP-I) al 10 % (antimicrobiano) durante el mismo período. Después de la intervención final, los investigadores hicieron un seguimiento de cada grupo durante 14 días.

Al compararlo con la tasa nacional, el grupo de irrigación nasal tuvo un riesgo 8.5 veces menor de hospitalización, también se encontró una relación dosis-respuesta. A diferencia del 42 % de las personas con COVID-19 que realizaron irrigación nasal con menor frecuencia, el 80 % de aquellos que la realizaron dos veces al día no presentaron ningún síntoma o solo presentaron un síntoma leve.

Además, solo el 13 % de las personas que realizaron la irrigación nasal presentaron síntomas hasta el día 28, mientras que, en el otro estudio, el 50 % presentó síntomas por 21 días o más.8 Según los investigadores:9

"Nuestros resultados respaldan que la irrigación nasal presurizada reduce el riesgo de hospitalización en personas de alto riesgo con COVID-19, lo que sugiere que es una medida segura que podría tener un gran impacto en la salud pública. A partir de noviembre de 2021, la reducción del 11 al 1.3 % en términos absolutos, representaría una reducción de más de 1 000 000 personas de edad avanzada hospitalizadas. Si se confirman estos hallazgos en otros estudios, entonces la posible reducción de la morbilidad y la mortalidad a nivel mundial podría ser bastante significativa".

El Dr. Richard Schwartz, autor principal del estudio, dijo: "Encontramos una reducción de 8.5 veces en las hospitalizaciones y ningún caso de muerte. Estos dos resultados son bastante prometedores".10 Además, otra investigación también respalda el uso de la irrigación nasal como un "complemento útil para los tratamientos de primera línea para combatir el COVID-19".11

Los beneficios del lavado nasal hacen que la respuesta al COVID sea en vano

La Dra. Amy Baxter, autora del estudio y especialista en medicina de emergencia en el Medical College of Georgia en Augusta University, dijo que para el estudio se inspiró en sus visitas al sudeste asiático, donde la irrigación nasal forma parte de la higiene personal diaria. La Dra. Baxter explicó:12

"Lo que decimos en la sala de emergencias y en los quirófanos es que la solución a la contaminación es la dilución... Si hay un contaminante, mientras más se enjuague, más fácil será eliminar la suciedad, los virus y cualquier otra cosa... Pensamos: si podemos eliminar parte del virus dentro de las 24 horas posteriores al diagnóstico, entonces tal vez podamos reducir la gravedad de la enfermedad".

Y nuestra teoría resulto ser cierta, aunque este hallazgo no debería caernos de sorpresa. En 2019, los investigadores de la Khon Kaen University en Tailandia hicieron un hallazgo similar, es decir, que la irrigación nasal es un método efectivo para tratar las enfermedades nasales, ya que ayuda a limpiar la secreción nasal y mejora la congestión nasal, el dolor de los senos paranasales, el dolor de cabeza, el gusto y el olfato, e incluso la calidad del sueño.13

Steve Kirsch, director ejecutivo de la Vaccine Safety Research Foundation, fue un paso más allá y explicó que la impresionante efectividad de la irrigación nasal para reducir las hospitalizaciones por COVID-19 hace que la respuesta a la pandemia sea "innecesaria y dañina":14

"Ninguna de las medidas para combatir la pandemia era necesaria. Para reducir las tasas de hospitalización a niveles comparables a los de la gripe, solo tenían que decirles a las personas recién infectadas que se enjuagaran la nariz con una solución salina y listo. Pero a pesar de toda esta evidencia, los CDC aún no dicen nada al respecto...
Este método también podría aplicarse a cualquier otro virus o bacteria, según el mecanismo de acción. Y aunque también es muy seguro, las principales instituciones médicas siguen sin utilizarlo... las universidades deberían exigirles a sus estudiantes que, en lugar de vacunarse, se enjuaguen la nariz con solución salina después de contraer COVID".

Los aerosoles nasales y bucales podrían protegerlo del COVID-19

La irrigación nasal solo es una forma de protegerse contra el COVID-19. Los aerosoles nasales y bucales que contienen povidona yodada (PVP-I), un agente microbicida con un efecto antivirucida del 99.99 %,15 también podrían ayudarlo a protegerse del COVID-19.

Un estudio que se publicó en el Indian Journal of Otolaryngology and Head & Neck Surgery, recomendó el aerosol de PVP-I por vía oronasal para los trabajadores de la salud y cualquier otra persona para ayudar a prevenir el COVID-19, 16 lo que concuerda con muchos otros estudios que también encontraron beneficios por hacer gárgaras, irrigación nasal y nebulización con PVP-I y otros compuestos, que incluyen el yodo de Lugol, la solución salina y el peróxido de hidrógeno.17

En este caso, la formulación en aerosol fue muy efectiva porque permitió que el ingrediente activo se difundiera mejor y llegara hasta lugares más profundos de la nariz y la nasofaringe, que es la parte superior de la garganta detrás de la nariz. El aerosol por vía oronasal actúa como una capa protectora que recubre la mucosa nasal y oral.

Por lo general, si se expone al SARS-CoV-2, ingresará a su cuerpo a través de la nariz y la boca, y permanecerá allí por un tiempo antes de unirse a los receptores ACE2 y entrar a las células. Una vez que el virus entra en sus células, comienza a multiplicarse.

Al crear un escudo protector, el aerosol por vía oronasal ayuda a evitar que el SARS-CoV-2 se una a los receptores ACE2 y que entre en sus células. En un ensayo clínico que aún no se publica,18 los investigadores obtuvieron resultados positivos después de utilizar un aerosol de PVP-I al 0.6 % por vía oronasal en 189 pacientes con COVID-19. La solución al 0.6 % tuvo una tasa de efectividad de casi el 81.5 %, que fue mayor que la de otras concentraciones (0.4 % y 0.5 %) y “casi no produjo irritación de la mucosa”.19

El peróxido de hidrógeno nebulizado para combatir las infecciones respiratorias

Fue impresionante ver que el simple hecho de hacer irrigaciones nasales con solución salina normal tuvo un impacto profundo en las tasas de hospitalizaciones por COVID. Mi intervención favorita para el COVID consiste en nebulizar una solución salina normal con una cantidad muy pequeña de peróxido de hidrógeno, la mayoría de los peróxidos de venta libre tienen una concentración del 3 %, pero recomiendo diluirlo unas 30 veces para obtener una concentración del 0.1 %.

Recuerde, el estudio que se mencionó demuestra que la nebulización salina simple es muy efectiva, por lo que no necesita mucho peróxido para mejorar su efecto. El video de arriba muestra a detalle cómo preparar la solución de peróxido de hidrógeno y utilizar el nebulizador.

La CLAVE es tener todo preparado con anticipación, debe tenerlo ANTES de enfermarse, ya que esperar varios días para comprarlo, si es que lo encuentra, podría reducir mucho su efectividad.

Tabla de peroxido de hidrogeno

Recomiendo utilizar peróxido nebulizado ante cualquier sospecha de infección respiratoria, y cuanto antes, mejor. No pasa nada si lo utiliza todos los días, e incluso podría producir otros efectos beneficiosos, como incrementar de forma rápida los niveles de oxígeno en la sangre y optimizar el microbioma.

Dado que el momento en el que inicia el tratamiento influye mucho en los resultados, que de preferencia debe ser desde el primer día, lo ideal es tener el nebulizador y los productos en su casa listos para usar. Le recomiendo que evite utilizar un nebulizador de batería y mejor optar por una unidad que se conecta al enchufe.

Desde que surgió la pandemia, comencé a investigar el peróxido nebulizado y me encontré con muchos informes anecdóticos de personas que lo han utilizado con éxito, incluso en etapas más avanzadas. El Dr. David Brownstein ha tratado con éxito a cientos de pacientes con COVID-19 a través de estrategias de refuerzo inmunológico como el peróxido de hidrógeno por vía intravenosa o nebulizado, yodo, vitaminas A, C y D orales y ozono por vía intramuscular.

En un reporte de caso de 107 pacientes con COVID-19 que trató, 91 (85 %) utilizaron peróxido nebulizado diluido con solución salina normal, más yodo de Lugol.20Brownstein también recomienda agregar yodo al nebulizador, ya que parece hacerlo aún más efectivo.

Consejos para una buena irrigación nasal

Para la irrigación nasal suele recomendarse agua salina un poco tibia, que se obtiene al combinar 2.5 gramos de sal con 500 mililitros de agua. 21 Para una acción antimicrobiana adicional, se puede agregar povidona yodada (del 0.5 % al 1 %) a la solución salina.

Un estudio que se publicó en el Indian Journal of Otolaryngology and Head & Neck Surgery, señaló que utilizar solución salina y PVP-I "como solución de irrigación puede mejorar la protección contra el COVID-19, lo que podría ser una excelente forma de protegerse en esta lucha contra el COVID-19".22

Si desea probar la irrigación nasal con una olla neti u otro dispositivo, y está pensando en preparar su propia solución salina, es importante recordar que solo debe utilizar agua destilada, estéril o hervida. El agua del grifo puede contener bacterias y protozoos que pueden ser dañinos cuando entran al cuerpo por las fosas nasales,23 por lo tanto, debe no debe utilizar agua de grifo para hacer irrigaciones nasales.