HISTORIA EN BREVE

  • La coagulación sanguínea anormal fue uno de los primeros efectos misteriosos en la salud que surgieron en la pandemia del COVID, primero como causa de la infección natural y luego como efecto secundario de las vacunas anticovid. A mediados de marzo de 2021, 20 países habían suspendido el uso de la vacuna anticovid de AstraZeneca, ya sea en su totalidad o parcialmente, después de que se presentaran casos de coágulos sanguíneos mortales
  • En diciembre de 2021, un equipo de científicos internacionales explicó a detalle el mecanismo por el que la vacuna de AstraZeneca fomenta la coagulación sanguínea. El protector del vector, un virus debilitado del resfriado de chimpancé, en algunas personas atrae las plaquetas. Su cuerpo confunde estas plaquetas con una amenaza y produce anticuerpos para combatirlas, lo que provoca coágulos sanguíneos peligrosos
  • Investigadores israelíes también han relacionado la vacuna de Pfizer con un raro trastorno de la coagulación sanguínea
  • Un estudio sueco encontró que dos dosis de la vacuna anticovid proporcionaba una protección del 43 % contra la infección por ómicron en la semana 4. Para la semana 14, la protección era cero. La eficacia contra la hospitalización relacionada con la enfermedad del COVID se mantuvo alrededor del 80 % hasta la semana 25, pero bajo al 40 % en la semana 40. Con el uso de un método de análisis estadístico, se descubrió que los suecos tenían un mayor riesgo de muerte u hospitalización por COVID cerca de un año después de recibir la segunda dosis
  • El informe de un caso reciente vincula a las vacunas anticovid con la miocarditis letal (inflamación del corazón) y encefalitis (inflamación del cerebro)

Por el Dr. Mercola

La coagulación sanguínea anormal fue uno de los primeros efectos misteriosos en la salud que surgieron en la pandemia del COVID, primero como causa de la infección natural y luego como efecto secundario de las vacunas anticovid.

A mediados de marzo de 2021, apenas cuatro meses después del lanzamiento de las vacunas anticovid, 19 países europeos más Tailandia1 habían suspendido el uso de la vacuna de AstraZeneca, ya sea en su totalidad o en una parte, debido a los reportes de coágulos sanguíneos mortales.2,3

A diferencia de las vacunas de Moderna y Pfizer, la vacuna de AstraZeneca utiliza un vector viral, un virus del resfriado de chimpancé modificado genéticamente y presuntamente no infeccioso, para entregar ADN de doble cadena a la proteína spike del SARS-CoV-2 en sus células.4

A principios de ese mes, el portal The Defenderreportó5 datos del Reino Unido que demuestran que la vacuna de AstraZeneca fue responsable de una cantidad de eventos adversos alrededor de un 77 % más elevada y un 25 % más de muertes que la vacuna de Pfizer. Casi al mismo tiempo, los médicos del Hospital de la Universidad de Oslo también dijeron que los trastornos de coagulación sanguínea de algunos pacientes que habían recibido la vacuna de AstraZeneca fueron causados por la vacuna.6 Un artículo del 18 de marzo de 2021 en la revista Science Norway decía lo siguiente:7

“'Se ha confirmado nuestra teoría de que esta es una poderosa respuesta inmunológica que tal vez fue provocada por la vacuna', dice el profesor y médico jefe Pål Andre Holme... 'En colaboración con expertos en el campo del Hospital Universitario del Norte de Noruega HF, encontramos anticuerpos específicos contra las plaquetas sanguíneas que pueden causar estas reacciones... esto es lo que dijo Pål Andre Holme...
Cuando se le pidió que aclarara por qué dijo "tal vez" en la cita, Holme respondió de forma contundente que habían encontrado la causa de estos raros casos de coágulos sanguíneos.
Sabemos la razón. Él afirma que 'La vacuna es la única explicación a la respuesta inmunológica que experimentaron estas personas.' [Diario nacional noruego] VG también le pregunta a Holme cómo sabe que esta respuesta inmunológica no es causada por otra cosa.
'No hay nada en el historial de estos pacientes que pueda provocar una respuesta inmunológica de este nivel. Estoy seguro de que los anticuerpos que hemos encontrado son la causa, y por más que buscamos, la vacuna es la única explicación', responde.”

Estudio explica el mecanismo de acción

A principios de diciembre de 2021, un equipo de científicos internacionales publicó un artículo8 donde explicaba el mecanismo por el cual la vacuna de AstraZeneca fomenta la coagulación sanguínea. Como lo informó el periódico Daily Mail en ese momento:9

“Un equipo de expertos internacionales, que involucra a investigadores de AstraZeneca, dice que en un número muy pequeño de casos, cerca de uno de cada 100 000 en el Reino Unido, la vacuna puede desencadenar una reacción en cadena que hace que el cuerpo confunda sus propias plaquetas sanguíneas con fragmentos de virus...
Descubrieron que la protección de la vacuna vectorial, el virus del resfriado debilitado que se usa para enseñar a las células a cómo neutralizar el COVID, a veces funciona como un imán que atrae las plaquetas, una proteína que se encuentra en la sangre.
Por razones que los científicos aún están investigando, el cuerpo confunde estas plaquetas con una amenaza y produce anticuerpos para combatirlas. La combinación de plaquetas y la agrupación de anticuerpos causa la formación de coágulos sanguíneos peligrosos...
Es decir, después de ser administrado al cuerpo, el adenovirus se une a una proteína específica en la sangre, conocida como factor plaquetario 4 (PF4), que por lo general el cuerpo la utiliza para promover la coagulación en caso de lesión.
Mediante el uso de imágenes muy detalladas del adenovirus en la vacuna, los científicos demostraron que el adenovirus en la vacuna de Oxford-AstraZeneca tiene carga negativa y podría atraer proteínas cargadas positivamente como un imán.
Los investigadores creen que en caso de "identidad equivocada", el sistema inmunológico considera a este grupo de plaquetas como una amenaza y libera anticuerpos para atacarlo, los cuales se adhieren a él, lo que desencadena coágulos sanguíneos amenazantes. Esta condición se llama trombocitopenia inmune trombótica inducida por la vacuna (VITT)”.

¿Cuánto tiempo permanece el riesgo?

Se desconoce cuánto tiempo permanece el riesgo de coagulación sanguínea. A mediados de septiembre de 2022, la Asociación Americana del Corazón informó que el riesgo de coagulación sanguínea anormal sigue siendo elevado casi un año después de la infección natural:10

“Las personas que contrajeron COVID-19 tenían un mayor riesgo de coágulos sanguíneos peligrosos durante casi un año después, según un nuevo estudio11 sobre las secuelas de una infección por SARS-CoV-2...
El COVID-19 se relacionó con un riesgo mucho mayor de problemas relacionados con coágulos sanguíneos, incluyendo ataques cardíacos y derrames cerebrales poco después del diagnóstico, en comparación con las personas que nunca tuvieron COVID-19 [y]... ese riesgo se mantuvo más alto en algunos problemas, hasta 49 semanas después...
Los investigadores encontraron que la primera semana después de un diagnóstico de COVID-19, el riesgo de un coágulo sanguíneo arterial, el tipo que podría causar un ataque cardíaco o un derrame isquémico al bloquear el flujo de sangre al corazón o al cerebro, era casi 22 veces mayor que en una persona sin COVID-19. Ese riesgo se redujo demasiado, a veces hasta cuatro veces más en la segunda semana.
‘Entre las semanas 27 y 49, el riesgo de coágulos arteriales incrementa en un 30 %’, dijo Jonathan Sterne, autor y profesor de estadística médica y epidemiología en la Universidad de Bristol. ‘Pero ese incremento es más grave y duradero en los coágulos más grandes en las venascuando este viaja a los pulmones, lo que provoca la trombosis venosa profunda y embolia pulmonar.
En la primera semana después de un diagnóstico de COVID-19, el riesgo de tales problemas venosos fue 33 veces mayor. Para la tercera y cuarta semana después del diagnóstico, el riesgo seguía siendo unas ocho veces mayor. Y entre las semanas 27 y 49, el riesgo seguía siendo 1.8 veces más elevado que en una persona que nunca tuvo COVID-19”.

Si el riesgo de coagulación sanguínea sigue siendo alto durante casi un año después de la infección natural, parece lógico pensar que el riesgo incrementa mucho más en las personas que recibieron una o más vacunas anticovid, ya que sus cuerpos ahora están produciendo la proteína spike tóxica, y no hay nada que detenga su producción.

Aún no sabemos cuánto tiempo el cuerpo humano continuará produciendo la proteína spike después de la vacuna anticovid. A pesar de que la vacuna de AstraZeneca fue acusada como la responsable de los coágulos sanguíneos, las vacunas de ARNm de Pfizer y Moderna no son más seguras en este sentido.

La vacuna anticovid de Pfizer y su relación con un trastorno de la coagulación sanguínea

A principios de junio de 2021, una investigación israelí sugirió que había un vínculo entre la vacuna de Pfizer y la púrpura trombocitopénica trombótica (TTP), que es muy similar a la trombocitopenia inmune trombótica inducida por la vacuna o VITT. Puede encontrar una lista de características distintivas entre ambos síndromes en UpToDate.com.12 Según The Defender:13

“Los científicos del Institute of Hematology at Shamir Medical Center dijeron que comenzaron a investigar el posible vínculo después de los reportes de un aumento repentino de TTP en el país: cuatro casos en un mes frente a dos o tres casos al año. La TTP es un trastorno autoinmunológico que fomenta la formación de coágulos sanguíneos en pequeños vasos sanguíneos de todo el cuerpo...
El equipo médico dijo que encontró una "conexión cronológica" entre la vacunación y la aparición de los síntomas de la TTP. Dijeron que esto ocurrió tanto en pacientes nuevos como en pacientes con TTP preexistente cuya enfermedad había estado en remisión pero que reapareció poco después de la vacuna...
Tal como lo reportó The Defender en abril, desde diciembre 2020, a los funcionarios de los Estados Unidos se les dijo que las vacunas de Pfizer y Moderna, al igual que la de AstraZeneca y J&J, podrían presentar riesgos similares de coágulos sanguíneos.”

Incluso antes de su lanzamiento, los expertos advirtieron que los coágulos sanguíneos y los problemas cardiovasculares eran predecibles. Entre los expertos se encontraba el Dr. Patrick Whelan, especialista en pediatría, quien en una carta14 a la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos advirtió que las vacunas podrían “causar lesiones microvasculares y coágulos sanguíneos en todo el cuerpo, incluyendo en el cerebro, corazón, hígado y los riñones, de formas que no se evaluaron en los ensayos de seguridad”.

También señaló que los estudios que analizaron la infección natural encontraron que "las proteínas virales parecen causar daño en los tejidos sin replicar de manera activa el virus", y si eso era cierto, Whelan sospechó que la proteína spike producida en respuesta a las vacunas también podría causar el mismo tipo de daños.  Hoy en día, existe mucha evidencia que indica que las sospechas del Dr. Whelan eran correctas.

Con el tiempo, las vacunas pueden aumentar el riesgo de muerte por COVID

Los estudios ahora también están confirmando la evidencia de que las vacunas podrían estar causando una mejora dependiente de anticuerpos (ADE) y que podrían matar las células del corazón y del cerebro. Comenzando con la evidencia de ADE, un estudio sueco15 que utilizó datos de toda la población sueca mayor de 12 años, un total de 9,153,456 personas, encontró que dos dosis tenían una protección del 43 % contra la infección por ómicron en la semana 4. Para la semana 14, la protección mermaba a cero.

La efectividad contra la hospitalización relacionada con COVID se mantuvo alrededor del 80 % hasta la semana 25, pero se redujo al 40 % en la semana 40. Si bien estos datos se mencionan en el resumen, un hallazgo más intrigante permanece oculto en el texto que pocos se toman el tiempo de leer. Según el periodista de investigación Alex Berenson:16

“Basado en un análisis estadístico [método de spline cúbico], las personas vacunadas tenían un MAYOR riesgo de muerte u hospitalización por COVID cerca de un año después de recibir su segunda dosis. Los gráficos (b y d a continuación) muestran que la protección de la vacuna contra la muerte y la hospitalización empieza a disminuir poco a poco después de unos cinco meses y luego merma a los nueve meses...
Estos datos proporcionan evidencia de una posible "mejora dependiente de anticuerpos" por la vacuna. En la ADE, las vacunas hacen que nuestro sistema inmunológico produzca anticuerpos que ayudan a que un virus u otro patógeno nos ataque...
(El gráfico superior muestra el riesgo relativo de infección, hospitalización, cuidados intensivos y muerte por cada semana después de dos dosis de la vacuna. La línea roja indica cero efectividad; cuando la línea azul cae por debajo de ella, sugiere que las personas vacunadas tienen un mayor riesgo de infección).”
Tabla de hospitalizaciones

Cuando utilizaron otro método estadístico, llamado regresión polinomial estándar, las vacunas siguieron siendo moderadamente efectivas contra la hospitalización y la muerte a lo largo del tiempo, pero la protección contra la muerte alrededor de los nueve meses cayó a 45 %, después de ese periodo, la efectividad comenzó a aumentar otra vez como todo un misterio.

Según Berenson, el autor principal del artículo no respaldó ningún método como superior al otro. Cuando se le pidió que diera un comentario, el Dr. Yiyi Xu le dijo a Berenson que "necesitaban más datos para saber qué hallazgo podría ser correcto" y que, en la actualidad, "la estimación es muy incierta para ambos análisis".

Las vacunas anticovid matan a las células del cerebro y del corazón

Otra investigación reciente17 vincula a las vacunas anticovid con la miocarditis letal (inflamación del corazón) y la encefalitis (inflamación del cerebro). Según Steve Kirsch:18

“El documento que lleva por nombre: ‘A Case Report: Multifocal Necrotizing Encephalitis and Myocarditis after BNT162b2 mRNA Vaccination against COVID-19’, fue publicado el 1 de octubre, y...   100 000 leyeron el resumen y más de 6000 leyeron todo el documento”.

El informe explica el caso de un hombre de 76 años con enfermedad de Parkinson (EP) que murió tres semanas después de recibir su tercera vacuna anticovid. La primera vacuna que recibió en mayo 2020 fue la de AstraZeneca, luego dos dosis de Pfizer en julio y diciembre de 2021, respectivamente.

La autopsia confirmó su diagnóstico de párkinson, pero también reveló otros problemas inesperados que contribuyeron a su muerte, entre ellas:

  • Neumonía por aspiración
  • Arterioesclerosis sistémica
  • Vasculitis aguda (inflamación vascular) tanto en el cerebro como en el corazón
  • Encefalitis necrotizante multifocal (es decir, muerte de tejido en todo el cerebro)
  • Miocardiopatía crónica (enfermedad cardíaca)
  • Miocarditis linfohistiocítica aguda leve (una forma rara de miocarditis que ocurre cuando los linfocitos, glóbulos blancos, ingresan e inflaman el músculo cardíaco)

Los análisis de antígenos del SARS-CoV-2 (proteínas spike y nucleocápside) revelaron que la inflamación solo se relacionó con la proteína spike, sobre todo las que se encuentran en las células endoteliales de los vasos sanguíneos pequeños. Los autores indicaron lo siguiente:19

“Dado que no se pudo detectar la proteína nucleocápside, la presencia de la proteína spike se relaciona más con la vacunación que con la infección viral. Los hallazgos corroboran reportes previos de encefalitis y miocarditis a causa de las vacunas anticovid que utilizan tecnología genética”.

La evidencia demuestra que las vacunas anticovid pueden ser mortales

Kirsch menciona más evidencia que demuestra que las vacunas anticovid pueden causar la muerte, incluyendo el reporte llamado20 “On COVID Vaccines: Why They Cannot Work, and Irrefutable Evidence of Their Causative Role in the Deaths After Vaccination", de los Dres. Sucharit Bhakdi y Arne Burkhardt.

El equipo examinó 15 cuerpos de personas que murieron de siete días a seis meses después de vacunarse y se descubrió que 14 (93 %) de las muertes fueron a causa de la vacuna.

Los Dres. Bhakdi y Burkhardt afirman que desarrollaron una forma de detectar la proteína spike en el tejido humano y dicen que encontraron esta proteína en los tejidos de las personas que sufrieron alguna lesión o que murieron a causa de estas vacunas.

El equipo examinó 15 cuerpos de personas que murieron de siete días a seis meses después de vacunarse y se descubrió que 14 (93 %) de las muertes fueron a causa de la vacuna anticovid.21 Los 14 mostraron evidencia clara de que el cuerpo se atacaba a sí mismo, incluyendo el corazón, lo que tuvo consecuencias fatales.

¿Qué puede hacer si sufrió una lesión por las vacunas anticovid?

Si recibió una o más vacunas y sufrió alguna lesión, lo primero que debe hacer es jamás volver a ponerse otra dosis de refuerzo de la vacuna anticovid, otra vacuna de terapia génica de ARNm, ni una vacuna regular. Debe ponerle un alto a los constantes ataques a su sistema inmunológico. Esta recomendación también va para todas las personas que recibieron una o más dosis de la vacuna anticovid y, que por suerte, no experimentaron efectos secundarios debilitantes.

Aún tiene riesgo de sufrir reacciones adversas a largo plazo, así que no vuelva a ponerse ninguna otra dosis. Con respecto al tratamiento, todavía hay más preguntas que respuestas, pero al parecer, muchos de los tratamientos que ayudan a combatir de manera efectiva la infección grave por COVID-19, también ayudan a combatir los efectos adversos de las vacunas. Esto tiene sentido, ya que la parte más tóxica y dañina del virus es la proteína spike, y uno de los efectos principales de las vacunas es que su cuerpo produzca esta proteína tan peligrosa.

La Dra. Michelle Perro (DrMichellePerro.com) y el Dr. Pierre Kory (DrPierreKory.com) son dos médicos que ya se especializan en tratar las lesiones por las vacunas anticovid.

Ambos coinciden en que el objetivo principal de un tratamiento es eliminar la proteína spike de su cuerpo. El remedio preferido de la Dra. Michelle para esto es la hidroxicloroquina, mientras que el Dr. Kory normalmente usa ivermectina. Ambos son medicamentos de unión, por lo que ayudan a eliminar la proteína spike.

Como miembro fundador del grupo Front Line COVID-19 Critical Care Alliance (FLCCC), el Dr. Kory ayudó a desarrollar el protocolo del FLCCC para el tratamiento posterior a la vacuna, el cual se llama I-RECOVER. Dado que el protocolo se actualiza de forma continua según los datos más recientes, su mejor opción es descargar la última versión en el sitio web del FLCCC en covid19criticalcare.com22 (hipervínculo a la página correcta).

Otros tratamientos y remedios efectivos

En artículos anteriores, también he cubierto una serie de tratamientos y remedios que pueden ser efectivos para las lesiones por las vacunas anticovid, como por ejemplo:

  • La oxigenoterapia hiperbárica, sobre todo en caso de derrame cerebral, ataque cardíaco, enfermedades autoinmunes y neurodegenerativas.
  • La alimentación con restricción de tiempo: el Dr. Kory también cree que es posible estimular el sistema inmunológico para permitir que la proteína spike se degrade y, con el tiempo, se elimine de las células de forma natural. Una de las estrategias para lograrlo es la alimentación con restricción de tiempo (TRE, por sus siglas en inglés), la cual activa la autofagia, un proceso de limpieza natural que elimina las proteínas dañadas, mal plegadas y tóxicas. Otra estrategia que produce este mismo efecto es la terapia de sauna. La mayoría de las personas comen más de 12 horas al día y esto deteriora el metabolismo. Para la mayoría de las personas, el tiempo ideal es de 16 a 18 horas de ayuno continuo con al menos una comida tres horas antes de acostarse. Si tiene sobrepeso, trate de alcanzar las 18 horas de ayuno al día; y si tiene un peso normal, 16 horas son suficientes.
  • Reduzca el consumo de grasas omega 6: hasta el 95 % de las personas consumen 10 veces más ácido linoleico del que deberían, lo que causa grandes cantidades de estrés oxidativo que alteran la respuesta inmunológica. Evite los aceites de semillas y los alimentos procesados.
  • El azul de metileno de grado farmacéutico estimula la respiración mitocondrial y ayuda a reparar las mitocondrias. Para las personas que tienen secuelas del COVID, se recomienda de 15 a 80 miligramos diarios, ya que eso podría ayudarlas a combatir la fatiga que suelen sufrir después de recibir la vacuna. El azul de metileno es la molécula madre de la hidroxicloroquina y se ha utilizado para tratar la malaria desde 1890. También puede ser muy efectivo en casos de derrame cerebral agudo. Pero si tiene deficiencia de G6PD (una enfermedad genética hereditaria), NO tome azul de metileno.
  • Luz infrarroja cercana, ya que estimula la producción de melatonina en sus mitocondrias,23 que es donde más beneficios produce. Eliminar las especies reactivas de oxígeno también ayuda a mejorar la función y reparación de las mitocondrias. La luz natural del sol se compone por un 54.3 % de radiación infrarroja,24 y lo mejor de todo, es gratis.