HISTORIA EN BREVE

  • Las ilusiones ópticas dependen de cómo percibimos la información que nuestros ojos recopilan y envían al cerebro. Esto les demuestra a los científicos cómo los ojos y el cerebro trabajan en conjunto
  • La ilusión de la ventana de Ames fue creada por un abogado graduado de Harvard que se convirtió en pintor, quien colaboró en el sistema de la teoría del color y terminó por desarrollar un gran interés por la física implicada en la percepción del color del ojo humano
  • La ilusión óptica de Ames podría considerarse como una demostración visual de una idea equivocada que muchos tienen sobre la ciencia: que basta con observar los datos para decidir qué teoría es la mejor. No obstante, las circunstancias de las que se obtienen los datos pueden alterar nuestra percepción
  • En 2015, se publicó una fotografía que ahora se conoce como “el vestido”, la cual causó una discrepancia cuando algunos la vieron en negro y azul, mientras que otros la percibieron en dorado y blanco. Una explicación de esto es la suposición que se hace sobre la iluminación, la cual puede cambiar el color del vestido
  • Algunos de los procesos que controlan la percepción ayudan a explicar el razonamiento motivado o sesgado que reduce la incomodidad mental de las personas. Es posible que un concepto similar sea responsable del miedo que se generó a gran escala para cambiar la percepción de la realidad y que esto haya causado un "miedo ilusorio al COVID-19"

Por el Dr. Mercola

Las ilusiones ópticas dependen de cómo percibimos la información que nuestros ojos recopilan y envían al cerebro. Esta es la base de la ilusión de la ventana de Ames1 que se ilustra en el video. La ilusión fue creada en 1947 por Adelbert Ames Jr., de quien tomó su nombre.2

Ames nació en Massachusetts en 1880. 3Obtuvo su título de abogado en la Universidad de Harvard y después de ejercer su profesión durante cuatro años, abandonó su carrera y empezó a pintar. Colaboró con su hermana en el desarrollo del sistema de la teoría del color, lo que le hizo desarrollar un gran interés por la física implicada en la percepción del color a través del ojo humano.

La habitación de Ames, que en un principio se llamaba Ames Demonstrations in Perception, es una sala de tamaño estándar que aparenta ser normal, pero hace que las personas parezcan encogerse cuando están dentro. 4 A partir de esto, el creador desarrolló la ilusión óptica de la ventana de Ames. Si bien las ilusiones ópticas pueden ser divertidas, también les enseñan a los científicos cómo trabajan en conjunto los ojos y el cerebro.

Debido a que vivimos en un mundo tridimensional, el cerebro usa pistas de lo que vemos para discernir la profundidad y la posición de las cosas. Sin embargo, cuando observamos una imagen bidimensional, ya sea en un papel o en la pantalla de una computadora, los colores y las sombras pueden engañar al cerebro. En otras palabras, la información que nuestros ojos recopilan y envían al cerebro crea una percepción distinta a la imagen real.

Por ejemplo, en la ilusión de la habitación de Ames, la habitación parece tener una forma normal desde la perspectiva del espectador, sin embargo, uno de sus lados es más corto y otro es más alto, lo que hace que una persona parezca mucho más alta que la otra, a pesar de que sean del mismo tamaño. Comprender la percepción visual y las ilusiones ópticas es esencial para comprender cómo se pueden manipular nuestras percepciones de la realidad.

El video esta disponible solo en Inglés

¿Qué es la ilusión de la ventana de Ames?

La palabra "ilusión" proviene del latín "illusio", que significa burlarse o mofarse de algo. 5 Esta ilusión se basa en la construcción de un trapezoide que tiene la apariencia de una ventana. En el video anterior, Derek Muller Ph.D., creador de Veritasium6, explica la ciencia detrás de esto y construye una ventana de Ames del tamaño de una ventana normal para demostrar la ilusión.

Lo que parece inexplicable es que, cuando el trapecio gira 360 grados, nuestros ojos perciben que oscila de un lado al otro. De acuerdo con Ames, la clave de la ilusión es que todas las personas que viven en una sociedad civilizada están acostumbradas a ver las cosas en ángulos de 90 grados: como en las puertas, mesas, cuadros, ventanas y paredes. Los investigadores denominaron esto como el mundo carpinteado.

No obstante, a menos que veamos uno de estos objetos de frente, la imagen parece un trapezoide de diferentes formas y tamaños. El cerebro recuerda estas formas y da por hecho que se trata de ángulos rectos, así que usa las sombras y la iluminación para percibir la profundidad. En el video,7 Muller hace referencia a un estudio de investigación8 de 1957 en el que los investigadores pusieron a prueba la teoría de que los niños que vivían en una sociedad sin ángulos de 90 grados serían menos susceptibles a la ilusión de la ventana de Ames.

Se descubrió que solo el 17.5 % de los niños que vivían en zonas rurales de Sudáfrica vieron la imagen oscilar, mientras que los demás la vieron rotar. No obstante, cuando vieron la imagen a 6 metros de distancia con un solo ojo, no hubo una diferencia significativa entre los niños que vivían en zonas urbanas y rurales, y casi el 90 % de los participantes vieron la imagen oscilar.

Esto parecía indicar que había algo más que el efecto del mundo carpinteado. Muller propone que la ventana Ames y el círculo de Heer utilizan una técnica artística que se conoce como "anamorfosis".9

Como él explica, cuando el lado más grande del trapezoide está más cerca de nosotros, lo percibimos como si estuviera girando. Sin embargo, cuando el lado más grande se aleja, sigue superando en tamaño al lado más pequeño, y esto hace que el cerebro siga percibiéndolo como si estuviera más cerca de nosotros.

Nuestro cerebro construye nuestra realidad

Muller plantea que la ilusión de la ventana de Ames es una demostración de una idea equivocada sobre la ciencia. 10

“[Es] la idea de que los científicos proponen teorías que compiten, y que lo único que debemos hacer es observar los datos para decidir cuál es la mejor teoría. La verdad es que hay muchas circunstancias en las que los mismos datos pueden obtenerse de realidades externas muy diferentes.
Por poner un ejemplo clásico ¿el sol gira alrededor de la tierra o la tierra gira sobre su propio eje? La observación de que el sol se mueve a través del cielo no soluciona ese debate por sí misma”.

Una de las características de algunas ilusiones ópticas es el retardo infinitesimal entre la realidad y nuestra percepción de la misma. Aunque parezca que vivimos en el presente, lo que percibe nuestro cerebro sucedió hace un aproximado de 120 milisegundos. 11

Ese es el tiempo que se necesita para que la luz llegue a la retina, se convierta en una señal eléctrica y luego se procese en el cerebro. Adam Hantman, un neurocientífico del Instituto Médico Howard Hughes, le describió el proceso a un reportero de Vox de la siguiente manera:12

"El pequeño y oscuro secreto de los sistemas sensoriales es que son lentos, tienen un retraso, no nos muestran lo que está ocurriendo en el momento, sino lo que sucedió hace 50 milisegundos o, en el caso de la vista, hace cientos de milisegundos".

Aun así, esta mínima pérdida de tiempo no afecta el funcionamiento del cerebro.  Si así fuera, los jugadores de béisbol no podrían batear la pelota a 80 mph y todos tendríamos algunos problemas de coordinación. Por el contrario, el cerebro predice lo que sucederá en función de experiencias anteriores. 13

Hantman explica que, aunque nuestra experiencia de la realidad no es en tiempo real, la información que recibimos ayuda a corregir cualquier error que haya cometido nuestro cerebro al predecir lo que sucedería. En otras palabras, nuestros sentidos de la vista y el oído podrían usarse como una guía para corregir las predicciones cuando estas no son acertadas.

Nuestras experiencias influyen en lo que vemos

En 2015, se publicó en Tumblr una fotografía que en la actualidad se conoce como “el vestido”. 14Se trata de una foto de mala calidad que se le tomó a un vestido en Reino Unido, con ayuda de un celular, la cual causó una gran discrepancia en Internet. 15El problema fue que algunas personas veían el vestido azul con negro, mientras que otras lo veían blanco con dorado.

Esta imagen ocasionó que las personas tomaran una de dos posturas, y ambas partes pensaban que la otra estaba equivocada. De acuerdo con The Guardian, Taylor Swift publicó en Twitter: “No entiendo el debate en torno a este extraño vestido y tengo la sensación de que se trata de alguna clase de truco. Estoy confundida y asustada. PD: OBVIO QUE ES AZUL CON NEGRO”.16

Dos años después, Pascal Wallisch, neurocientífico de la Universidad de Nueva York, publicó un estudio17en el Journal of Vision, en el que afirmó que muchos habían interpretado de forma subjetiva la manera en que se iluminaba el vestido y esto causó una percepción diferente.

En una encuesta en línea en la que participaron 13 417 personas, los datos revelaron que la suposición sobre la iluminación estaba más relacionada con el cronotipo subyacente de un individuo, o la diferencia entre las personas que se clasifican dependiendo de la hora en que se levantan, ya sea muy temprano o muy tarde.  18

En concreto, Wallisch puso a prueba la hipótesis19 de que las personas hacen diferentes suposiciones sobre la luz que ilumina el vestido en función de si se levantan muy temprano o muy tarde. Por ejemplo ¿la iluminación es natural o artificial? Él considera que hay factores que influyen en la percepción de la luz que incide sobre un objeto, lo que a su vez influye en la percepción del color.

Los resultados de la encuesta 20demostraron que las personas noctámbulas tenían más probabilidades de ver un vestido azul con negro, mientras que las madrugadoras tenían más probabilidades de verlo dorado con blanco. Wallisch planteó la hipótesis de que debido a que los madrugadores pueden pasar más tiempo bajo la luz del día, están más familiarizados con ese tipo de iluminación, así que es más probable que supongan que el vestido está iluminado por luz del sol.

Como explicó, "si asume que es de día, lo verá blanco con dorado, porque si quita el azul, lo que queda es amarillo".21 Sam Schwarzkopf, científico de la Universidad de Auckland, cree que este es un argumento convincente, pero aún puede haber otros factores que influyan en la percepción individual del color del vestido.

Wallisch considera que las personas hacen suposiciones con base en lo que ven con mayor frecuencia, lo cual fue una contribución duradera a la ciencia de la publicidad gracias al psicólogo Robert Zajonc, como señaló en un artículo en Slate22. Es una de las herramientas publicitarias que se utilizan para llamar la atención sobre diversos productos y servicios. Si vemos un anuncio las veces suficientes, es posible que seamos más propensos a confiar y comprarlo.

El mismo proceso es la base de otras percepciones

De acuerdo con Muller, la ilusión de Ames puede tener mayores implicaciones en la vida que solo un truco para engañar a la vista y expresa lo siguiente:23

“Y creo que podemos extender esto más allá de la ciencia. Quizás las ilusiones de Ames son una buena metáfora para la vida. Sentimos que somos capaces de percibir la realidad externa de forma directa, como una persona que observa la habitación Ames, pero la verdad es que hay un número infinito de geometrías que podrían verse igual.
Hoy en día, muchas personas reciben la misma información fundamental, pero llegan a conclusiones muy diferentes acerca del estado de la realidad. Así que creo que, en ese contexto, es importante recordar que algo tan simple como una pequeña imagen en rotación puede engañar a nuestros cerebros de maneras espectaculares”.

Los científicos creen que algunos de los mismos procesos básicos que controlan nuestras percepciones pueden explicar por qué podríamos ser propensos al razonamiento motivado. De acuerdo con Psychology Today, el razonamiento motivado se presenta “cuando el sesgo del razonamiento conduce a una conclusión o decisión particular, un proceso que suele ocurrir de forma inconsciente”.24

El razonamiento motivado también puede ayudar a reducir la incomodidad mental que sienten las personas cuando reciben información contradictoria que puede afectar su salud mental. En vez de examinar de nuevo la contradicción y evaluarla, lo más es fácil descartarla. Por ejemplo, en el panorama actual, es más fácil seguirle la corriente a las autoridades de salud pública en lugar de cuestionarlas y buscar investigaciones independientes que apoyen o contradigan sus recomendaciones.

Los investigadores también han descubierto que cuando la información no es clara, una recompensa puede cambiar la percepción. 25 Una revisión de la literatura de 2006 26 demostró una persona tendía a informar que veía una interpretación de un dibujo conforme a un resultado que era favorecido por el investigador.

En cada uno de los cinco estudios revisados, parecía que la motivación externa tenía un gran impacto sobre las elecciones de los participantes. Otro estudio27 que publicó la Universidad de Nueva York en 2014, planteó cuestionamientos sobre por qué la evidencia en video no se evaluó de forma objetiva. Emily Balcetis, una investigadora del estudio y profesora adjunta del Departamento de Psicología de la NYU, comentó lo siguiente en un comunicado de prensa:28

“Nuestros hallazgos demuestran que la evidencia en video no se evalúa de manera objetiva, sino que incluso puede estimular nuestros sesgos existentes. Con la proliferación de imágenes de vigilancia y otras pruebas de vídeo, junto con la fe ciega que se tiene en el sistema judicial respecto a la información que podemos ver con nuestros propios ojos, debemos proceder con cautela."

Es necesario un miedo ilusorio masivo para coartar la libertad

Aunque las ilusiones ópticas son divertidas y señalan lagunas de nuestra percepción, un concepto similar es el que se utiliza para controlar el comportamiento a gran escala. Los videos y la publicidad se han utilizado para generar miedo a gran escala en la población, lo que a su vez cambia nuestra percepción de la realidad. Este video de 20 minutos creado por After Skool y Academy of Ideas explica las tácticas que se emplean para sembrar y fomentar las enfermedades mentales a gran escala.

En un artículo del 22 de diciembre de 202029 en Evie Magazine, S.G., Cheah analiza cuál podría ser el verdadero problema en cuestión: la locura masiva que surgió a causa del "miedo ilusorio al COVID-19". Cheah hace referencia a conferencias y artículos del psiquiatra y experto médico legal, el Dr. Mark McDonald,30 quien cree que "la verdadera crisis de salud pública radica en el miedo que se transformó y evolucionó en una forma de psicosis delirante masiva".

La psicología detrás de la epidemia del COVID apostó por cambiar la percepción que tienen las personas sobre el mundo, así como crear temor suficiente para que renuncien a su libertad de forma voluntaria “incluso cuando las estadísticas apuntan a una tasa de mortalidad muy baja entre los niños y los adultos jóvenes (del 0.002 % a los 10 años y 0.01 % a los 25), los jóvenes y las personas sanas siguen aterrorizadas de enfrentarse al coronavirus”.31

La alteración de la percepción contribuyó a una psicosis de formación masiva, que proporciona una explicación coherente del por qué tantas personas han sido víctimas de las mentiras y la propaganda de la narrativa dominante respecto al COVID-19. No obstante, esta no es la primera vez que se aplica la psicosis de formación masiva.

Mattias Desmet, profesor de psicología clínica en la Universidad de Gante en Bélgica, quien ha realizado más de 130 publicaciones,32 ha estudiado este fenómeno durante muchos años, el cual se remonta a más de cien años. Como se explica en el video, dos ejemplos de este fenómeno son las cacerías de brujas en Estados Unidos y Europa durante los siglos XVI y XVII, en los cuales, miles de mujeres fueron asesinadas como “chivos expiatorios de sociedades que habían enloquecido”.33

En el libro “La psicología del totalitarismo”, Desmet explica que la formación masiva ha crecido en los últimos 200 años. A gran escala, este fenómeno conduce al pensamiento totalitario y, con el tiempo, a los estados totalitarios. Explica las cuatro condiciones necesarias para lograr una formación masiva a gran escala, que incluyen la disonancia cognitiva y el dolor psicológico, los cuales son factores que suelen infundir una necesidad desesperada de un cambio y una vía de escape:34

  • Sensación de aislamiento social y de estar solo entre un gran número de personas
  • Sensación de que la vida no tiene sentido ni importancia
  • Niveles elevados de ansiedad flotante
  • Niveles elevados de frustración y agresión

Desmet recomienda seguir estos cuatro pasos para liberarnos de la psicosis de formación masiva y promover un cambio favorable en un círculo social a la vez:35

  • Seguir alzando la voz
  • Tener contacto con personas que tengan ideas afines a las nuestras
  • Construir, junto con ellos, una narrativa de una nueva normalidad, que no debe confundirse con la "nueva normalidad" que están intentando promover los movimientos tecnocráticos y transhumanistas. De esta manera, las personas podrán ver que hay otras opciones de dejar atrás la antigua normalidad
  • Seguir los principios de la resistencia pacífica, sin violencia

El último paso es muy importante, ya que, si usamos cualquier clase de agresión, incluso en nuestra forma de hablar, las masas pueden usar eso para justificar que tenían razón al tener ideas contrarias a las nuestras. La resistencia pacífica es la estrategia más eficiente cuando intentamos resistir y desafiar la psicosis de formación masiva que nos rodea.